Un nuevo brote relacionado con la revisión del gas butano ha dado la cara hace tan solo unos días.Por este motivo, desde THADERCONSUMO, instamos a los consumidores a que bajo ningún concepto dejen pasar a sus domicilios a supuestos técnicos, sin que haya previamente avisadas por el usuario de butano y piden que se informen antes de cuando les corresponde realizar la revisión de butano.  

La estada consiste concretamente en la personificación por sorpresa en tu domicilio de supuestos técnicos de que vienen con el objetivo de revisar tu instalación de gas o de cambiar las gomas. Suelen afectar en la mayoría de los casos a personas mayores, que con mayor frecuencia usan las bombonas. Además, se suele caer en la trampa porque visten de uniforme para que los asocies con alguna de las empresas del sector, te amenazan con cortar el suministro si no haces la revisión y te piden pagar en efectivo, aceptando en algunas ocasiones una rebaja con tal de salir de la vivienda con algo de dinero.  

Por su parte, para no ser estafados, es imprescindible conocer que, según el Decreto 125/2016, de 6 de septiembre, es responsabilidad del consumidor buscar a una empresa reconocida que haga esas revisiones oficiales necesarias, que deben ser cada 5 años, para las instalaciones fijas, como un calentador o la cocina. Por lo tanto, no es obligatorio que sea la empresa que hace entrega de las bombonas en el propio domicilio (puede ser cualquier empresa autorizada y habilitada por industria).

Además, debemos recordar que es necesario cambiar las gomas naranjas cada vez que caduquen (llevan la fecha impresa) y que el regulador no caduca, sino que habrá que cambiarlo solo cuando se estropee.   

Además, de estos conocimientos, queremos ofrecer al consumidor las siguientes pautas y consejos para no caer en la trampa:  

• No pueden presentarse los técnicos en tu casa a realizar la revisión sin una cita concertada previamente, a no ser que vengan con compañía policial y una orden de corte del suministro por riesgo de fuga, por ejemplo. 

• Por lo tanto, no debes facilitar nunca el paso de desconocidos que vengan a realizar esta revisión.   

• Una llamada a un vecino o incluso a la policía puede ayudar a resolver la probable “insistencia” de entrar en la vivienda de estos supuestos profesionales.

• Dentro del contrato que firmamos para obtener el suministro, se puede pactar un preaviso para concertar una cita cuando falte poco tiempo para que se te cumplan los 5 años del certificado.

Este preaviso servirá como notificación o justificante de que el inspector puede realizar la revisión tras el aviso.  

• Una vez que llega el técnico a nuestro hogar y realiza la inspección genera un presupuesto antes de hacer ningún tipo de modificación o arreglo en la instalación.

• Una vez que el cliente acepta el presupuesto, se realiza la reparación, generándose así una factura. Por tanto, nos deben entregar dos documentos diferentes (uno presupuesto y el otro será la factura).

• Los precios de las revisiones del butano son libres, por lo que es recomendable solicitar varios presupuestos a distintas empresas autorizadas y habilitadas. Si la goma o el tubo flexible está caducada, se recomienda solicitar el presupuesto que incluya el precio de la nueva goma.

• El pago de la revisión se hará in situ por la persona que contrate los servicios de la empresa o persona autorizada para tal fin, al finalizar la misma.

• Si la revisión ha sido superada de forma satisfactoria y sin anomalías, la empresa de revisión deberá facilitar a la persona usuaria el oportuno Certificado de Revisión que habrá que conservar hasta la siguiente revisión. Si se observara alguna anomalía, hará entrega del oportuno Informe de Anomalías que indicará la necesidad de corrección de las mismas.

• En el caso de que haya sido necesaria una sustitución de alguna pieza, la pieza antigua sustituida debe quedársela el consumidor, ya que es la única prueba o justificante de que dicha reparación o sustitución se realizó, ya que la reparación tendrá una garantía de 6 meses.

• No realices pagos sin validar los datos del destinatario.