Murcia, 4 dic (EFE).- El juez de Instrucción Número Seis de Murcia, Andrés Carrillo, tomó hoy declaración al constructor Santiago Martínez Esparza y a cuatro miembros de su familia en relación con una supuesta trama de corrupción urbanística que se investiga en Librilla.
Además de Martínez Esparza, prestaron declaración tres de sus hijos y su yerno, quienes fueron interrogados sobre su responsabilidad en la empresa Urbanizaciones, Viaductos y Saneamientos (Urvisán).
Urvisán, radicada en Los Alcázares, tiene relación comercial con la empresa Acadi, adjudicataria de la redacción del Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) de Librilla, cuyos propietarios, el funcionarios en excedencia José Luis Cano, y el ingeniero de caminos Domingo Peñalver, están imputados en el caso y el primero de ellos en prisión.
El gerente de Urvisan era J.A.N., cuñado de Martínez Esparza, que el pasado septiembre murió tras caer al vacío desde el piso número 12 de un edificio ubicado en la pedanía murciana de Espinardo.
Estas cinco personas que prestaron declaración hoy continuarán como imputadas en este caso, aunque el juez no tomó ninguna otra medida contra ellas.
En el marco de esta operación, el juez Carrillo dictó el pasado 22 de noviembre prisión provisional sin fianza para el alcalde de Librilla, José Martínez García; su edil de Urbanismo, Pedro Martínez Muñoz; el gerente de la empresa municipal del suelo, José Andrés Cortés, y el funcionario autonómico en excedencia José Luis Cano.EFE
