El presidente murciano critica que el Gobierno de la Nación “sube impuestos cuando todos los rebajan y genera problemas en vez de buscar soluciones para crear empleo, que es el objetivo fundamental”

Para el jefe del Ejecutivo regional, Rodríguez Zapatero “actúa sin guión y alimenta la incertidumbre, sin saber qué necesita España ni cómo lograrlo”

El presidente de la Comunidad Autónoma, Ramón Luis Valcárcel, asegura que el Gobierno central “va a contracorriente de las políticas económicas que han puesto en marcha otros países de la Unión Europea para hacer frente a la crisis”.

En un artículo publicado hoy en el diario El Mundo, el jefe del Ejecutivo murciano subraya que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero “sube impuestos cuando todos los rebajan y genera nuevos y mayores problemas para los españoles, en vez de buscar soluciones para crear empleo”.

Según Valcárcel, la situación económica de España difiere de la del resto de países de nuestro entorno porque Rodríguez Zapatero “actúa sin guión y alimenta la incertidumbre, sin saber qué necesita España, ni mucho menos cómo lograrlo”.

El presidente murciano señala que el jefe del Ejecutivo central “no gobierna para satisfacer las necesidades de los ciudadanos, sino en función de sus interés políticos”, y por eso “el proyecto socialista de Zapatero, si es que lo hay, está llamado al fracaso”.

“Sin una acción responsable, ordenada y rigurosa del Estado es imposible que salgamos de la crisis, pues sin políticas de Estado no hay recuperación posible”, argumenta Valcárcel, para quien el Ejecutivo central “se zafa de sus deberes con falsedades sobre el papel del Estado, volcando la responsabilidad sobre las comunidades autónomas, maniatadas competencialmente para poner freno al descalabro económico”.

Camino contrario a la recuperación

Ramón Luis Valcárcel defiende el papel fundamental que representa la confianza “para la buena marcha de cualquier economía de mercado” y lamenta que “la improvisación que cada día nos ofrece el presidente del Gobierno la ahuyenta y, con ella, las posibilidades de crear empleo y crecimiento económico”.

El Ejecutivo murciano resalta que “reputados expertos internacionales, entre ellos el Premio Nobel de Economía Edward Prescott, han señalado a España como el ejemplo de lo que no debe hacerse frente a la crisis, en contraposición a países como Alemania y Francia, que marcan el camino de la recuperación”.

Para Valcárcel, Alemania y Francia “se recuperan porque sus gobiernos han implicado a toda la sociedad en la reparación de sus mercados y han generado confianza entre sus ciudadanos, los empresarios, y los gobiernos territoriales”.

“Estos países –expone el presidente- han impulsado las inversiones en tecnología, en educación, en infraestructuras, han apostado por las regiones y las entidades locales y han establecido reducciones fiscales a la clase media, sobre todo para las rentas menos altas”.

El jefe del Ejecutivo regional precisa en su artículo que “en España, muy al contrario de lo que ocurre en estos países, la confianza se evapora y la incertidumbre crece en todas las áreas fundamentales para el desarrollo, basta con observar lo que está sucediendo con la política hídrica”.

Ineficacia y gasto desenfrenado

Para el presidente murciano, “la demostración de que el Gobierno central no sólo no hace lo mismo que esos países, sino todo lo contrario, es el Proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2010”, que incluye “grandes recortes en I+D+i y una subida de impuestos indiscriminada que retraerán de manera decisiva el consumo, lo que obstaculizará cualquier posible intento de recuperación”.

A juicio del presidente Valcárcel, los Presupuestos Generales del Estado “disuaden la actividad económica y empresarial, y, como consecuencia, impiden la creación de empleo, que debería ser el objetivo fundamental para el presidente Zapatero”.

Así mismo, Valcárcel subraya que hace año y medio Rodríguez Zapatero “nos hizo la promesa de pleno empleo y ahora España registra un 20 por ciento de paro, lo que representa más de cuatro millones de personas desempleadas”.

“Nuestros vecinos europeos nos muestran soluciones, pero el Gobierno central sigue enrocado en la ineficacia y el gasto desenfrenado, lejos de la austeridad y la coherencia que la situación demanda. Esto además es un triste ejemplo para la próxima presidencia de la Unión Europea”, concluye su artículo.