Esta tarde, a las 19 horas, se convoca al profesorado regional y al resto de la sociedad para mostrar el rechazo a los recortes educativos producidos en otras CCAA. Es de temer otro curso complicado en todos los niveles educativos, desde la Educación Infantil hasta la Universidad. Sin duda, las palabras de Aguirre disparan todas las alertas, destapan el plan oculto del PP de terminar con la gratuidad del Bachillerato y nos hacen temer el incremento de tasas en la Universidad.
El comienzo de este curso 2011/12 está marcado por los severos recortes educativos en distintas CCAA. Por suerte, en nuestra región entre todos y todas, con las movilizaciones del semestre pasado, conseguimos evitar que se nos aplicara una reducción de plantilla a partir del incremento de horas lectivas tal como las que están sucediendo en Madrid, Galicia, Navarra, Castilla-La Mancha, Cataluña o Canarias. Esto no significa que la educación regional no sufra recortes poco visibles socialmente pero muy dañinas en términos educativos:
1- El gasto de funcionamiento de los centros está bloqueado y lo que es más grave, no se producen las transferencias desde la CARM y muchos ayuntamientos, con lo que las cajas, vacías desde hace meses, no pueden dar respuesta a las necesidades existentes en el inicio de curso.
2- Incremento de ratio: el incremento bruto de alumnado y la congelación de la plantilla de profesorado está saturando, de nuevo, las aulas de nuestra región, especialmente en ESO y en Bachillerato donde no resulta extraño ver aulas con 40 alumnos/as, como en los años 80.
3- No creación de nuevas plazas escolares y grupos: como respuesta a la demanda en Educación de Personas Adultas, en los Programa de Cualificación Profesional Inicial (PCPI), Programas de Diversificación Curricular, Escuela de Idiomas y Ciclos Formativos.
4- Reducción de Programas Educativos y Desdobles: en algunos centros se ha suprimido el Bachillerato de Investigación, como en el IES Alcántara de Alcantarilla, mientras que en otros se eliminan los desdobles, las prácticas de laboratorio o se limitan a la mínima expresión los bilingües. Tampoco se han renovado los PROA (Programas de Refuerzo y Orientación Académica) en muchos centros, lo que unido al incremento de alumnado augura malas cifras educativas a corto plazo.
5- A lo largo del curso, con motivo del necesario recorte en 800 millones de euros del presupuesto regional para 2012, NOS TEMEMOS:
a. Reformulación de horarios e incremento lectivo, con la consecuente reducción de plantillas.
b. Continuación de la eliminación de Programas Educativos, con la consecuente redistribución de efectivos.
c. Reducción del Personal de Administración y Servicios, que ya se ha reducido a lo largo del año especialmente administrativos y conserjes, con la consecuente sobrecarga de trabajo para los equipos directivos y docentes.
d. Previsibles recortes salariales tanto a nivel estatal como regional en todos los niveles educativos (también universitarios).
e. Incremento de tasas públicas en los niveles educativos NO OBLIGATORIOS. En este sentido, las palabras de Esperanza Aguirre no hacen sino acrecentar estos temores, especialmente en Educación Infantil y Bachillerato, donde la enseñanza pública es gratuita, así como en FP de Grado Superior, Enseñanzas Artísticas Superiores y Enseñanzas Universitarias de Grado y Postgrado, donde la subvención pública para la reducción de los costes es muy alta.
Por otro lado, a nivel universitario nos tememos que este curso va a ser el curso de los recortes duros para el personal docente e investigador y el personal de administración y servicios, así como el año del previsible incremento de tasas para el alumnado (de cara al curso próximo). La situación, sin duda, es crítica. Ya a lo largo del año y en diversas ocasiones se nos ha informado a los órganos de representación sindical, tanto en Consejo de Gobierno como en correos electrónicos a la Comunidad Universitaria de la UPCT y de la UM, de las dificultades económicas por las que están pasando nuestras Universidades como consecuencia de los recortes de presupuesto y, de modo especial, por la falta de transferencia de recursos por parte de la Tesorería de la CARM a ambas Universidades: actualmente la deuda de la CARM supera ya los 100 millones de euros.
Y la situación no mejora, al contrario, empeora día a día y el gobierno regional no responde. Como consecuencia las dos universidades públicas de la Región están tomando medidas drásticas de control del gasto que han terminado por afectar a los programas de investigación y docente, con un bloqueo completo de todas las partidas presupuestarias finalistas. Por todo ello, desde STERM-Intersindical queremos hacer un llamamiento a las comunidades educativas de ambas universidades para que se sumen a las movilizaciones de resistencia contra los recortes pasados, presentes y futuros.
