Está compuesta por paneles con fotografías, maquetas y textos de edificios de arquitectura industrial de la Península Ibérica durante la etapa del Movimiento Moderno
Previamente a la inauguración se llevarán a cabo dos conferencias y una mesa redonda para, después, a las 20.30 horas, proceder a la inauguración
Ofrecer una visión global y pormenorizada de lo que la industria ha supuesto para el desarrollo del Movimiento Moderno en la Península Ibérica, es el principal objetivo de la exposición 'La arquitectura de la industria, 1925-1965', organizada conjuntamente por los colegios oficiales de Arquitectos y de Ingenieros Industriales, y perteneciente a la Fundación Docomomo.
La muestra, inaugurada hoy, revela cómo los arquitectos de aquella época en la búsqueda de nuevos materiales, de la eficacia constructiva y una exploración del espacio, desarrollaron la nueva arquitectura, en la que los aspectos representativos y simbólicos pasaron a un segundo plano.
Consta de 23 obras compuestas de fotografías y textos de edificios industriales hechos por arquitectos durante cuatro décadas, que corresponden al movimiento moderno, y se podrá visitar de lunes a viernes, hasta el día 17 de marzo en el salón de exposiciones del Colegio de Arquitectos, ubicado en la calle Jara Carrillo, número 5, Murcia.
Previamente a la inauguración de la muestra, se han celebrado las conferencias 'Patrimonio industrial y técnico: un legado todavía por conocer', que ha contado con la intervención de Pedro Jiménez Mompeán, exdirector general de Industria de la CCAA, y la conferencia 'La fábrica, entre el símbolo y la realidad', a cargo de Celestino García Braña, presidente de la Fundación Docomomo. Seguidamente se ha celebrado una mesa redonda, presidida por los decanos de los colegios oficiales de Arquitectos de la Región, Antonio García, y de Ingenieros Industriales, José Isidoro Marín.
Antonio García ha destacado durante su intervención que "las aportaciones de la arquitectura española al desarrollo de los grandes espacios requeridos para la industria en esa segunda etapa de la revolución industrial, que en occidente coincide históricamente con el curso del Movimiento Moderno o "Estilo Internacional" tienen, si cabe, desde su gran altura y calidad, el mérito complementario del sufrimiento y de la superación de la inmensa tragedia que supuso la guerra civil para la sociedad española, y el aislamiento tras la segunda guerra mundial".
Además, ha matizado que "es, situándonos en ese contexto, como podemos apreciar en su justa magnitud la grandeza de las aportaciones y el esfuerzo de aquellos arquitectos e ingenieros que supieron imponer la modernidad y el futuro venciendo las dificultades de un entorno decididamente hostil y retrógrado. Esta exposición en la que colaboramos las instituciones aquí representadas no es sino una mínima parte del homenaje que ellos merecen".
Por su parte, José Isidoro Marín, ha señalado que "esta unión representa la interdisciplinariedad, clave del Modernismo en la Europa durante este periodo. Este trabajo siempre colaborativo ilustra que finalmente las ciencias técnicas son un todo cuyas partes se complementan. Así debe ser hoy día entre Ingenieros Industriales y otros colectivos, en este caso los Arquitectos".
Algunos de los edificios que aparecen en la muestra son: OGMA, Industria aeronáutica de Portugal, Lisboa; Vidrierías de Llodio, Álava; Sefanitro, Barakaldo, Vizcaya; Central y salto de Grandas de Salime; Central hidráulica de Proaza, UEP, Subestações da União Eléctrica Portuguesa; HICA, Hidroeléctrica do Cávado, Braga; Fábrica Enmasa, Barcelona; Empresa Nacional Siderúrgica, Avilés; Comedores Seat, Laboratorios Seat; Talleres aeronáuticos de Barajas, Tabsa; Central lechera Clesa; Centro de estudios hidrográficos del Ministerio de Obras Públicas, Madrid; Gran Bodega del Tío Pepe, Jerez de la Frontera, Cádiz; Fábrica de cervezas El Aguila, Córdoba.
