Foto de 115
Foto anterior Foto siguiente 
Eso si, aquí tampoco nos dejaban cantar en murchos sitios y en los que nos dejaban, ni merecía la pena dado el excaso valor de la moneda húngara. Así que algo teníamos que hacer para ganarnos unos durillos... 
Prohibida la reproducción total o parcial sin el consentimiento expreso y por escrito