El portavoz de MC Cartagena, Jesús Giménez Gallo, ha denunciado hoy la falta de transparencia y el descontrol económico que rodean la obra de la estación de bombeo en el fondo sur del estadio municipal Cartagonova, así como el encarecimiento del recibo del agua que sufren todas las familias cartageneras.
"Lo que en 2020 se anunció como una modernización de la estación de bombeo de la Plaza de España, con un presupuesto de 2,2 millones de euros a cargo del superávit, acabó trasladándose al Cartagonova, con un coste previsto de 3,3 millones y un plazo de 15 meses", ha recordado Giménez Gallo, añadiendo que "cinco años después, la obra ya ha superado los 5 millones y nadie sabe cuál será el coste final". "Se ha convertido en un pozo sin fondo de dinero público", ha explicado.
El portavoz cartagenerista ha subrayado que esta obra, de las pocas que Arroyo ha impulsado en toda la legislatura, "lleva años perturbando el uso del estadio municipal, afectando a la explanada y cortando la senda paralela a la rambla de Benipila en la calle Luis Calandre". Según MC, se trata de una intervención sin planificación ni control, que consume recursos sin ofrecer mejoras tangibles.
"Mientras tanto, Arroyo ha subido los impuestos y ha encarecido el recibo del agua en torno a cuatro euros por factura", ha denunciado el líder de MC. "Los cartageneros pagan más, pero no reciben explicaciones ni transparencia. Es una gestión que castiga a los vecinos y beneficia a la concesionaria", ha recalcado.
Ante esta situación, MC Cartagena ha presentado una instancia en el Ayuntamiento para exigir la convocatoria inmediata de la Comisión de Seguimiento del Contrato del Agua, que por ley debe reunirse al menos una vez al año. "Desde que Arroyo es alcaldesa, apenas se ha reunido una sola vez y nunca por su voluntad", ha criticado el portavoz cartagenerista, que cree que "se resisten a convocarla porque no quiere dar explicaciones".
Giménez Gallo ha concluido reclamando responsabilidad institucional y rendición de cuentas: "La alcaldesa ha convertido un simple bombeo en una obra interminable y un recibo del agua en una herramienta de recaudación opaca". "Es hora de que dé la cara ante los cartageneros y explique por qué sus decisiones nos cuestan millones", ha sentenciado.
