Softtek asegura que estas herramientas son fundamentales para fomentar una manera de aprender inmersiva, activa e inclusiva.

La vuelta al cole de este año marca un antes y un después en las aulas. La Realidad Virtual (RV) y la Realidad Aumentada (RA) se han consolidado como herramientas clave para enriquecer el aprendizaje, al permitir que los estudiantes exploren contenidos de manera visual, dinámica e interactiva. Softtek, líder en soluciones tecnológicas globales, destaca cómo esta evolución no solo moderniza los recursos didácticos, sino que también contribuye a mejorar la comprensión, la motivación y la participación del alumnado.

En la actualidad, el aprendizaje puede vivirse de forma más envolvente, intuitiva y colaborativa, rompiendo las barreras físicas y conceptuales del aula tradicional. Las tecnologías inmersivas no solo captan la atención de los estudiantes, sino que estimulan su curiosidad y fomentan el pensamiento crítico a través de experiencias multisensoriales.

En un mundo donde lo digital forma parte integral de la vida cotidiana de los jóvenes, integrar estas tecnologías en el aula es una respuesta a las demandas de una generación que aprende haciendo, explorando y conectando. En el terreno de la educación, Softtek identifica tres beneficios clave de las tecnologías inmersivas:

Inmersión: las soluciones de RV y RA permiten a los alumnos sumergirse en escenarios tridimensionales diseñados para aprender desde dentro. Esto facilita la comprensión de conceptos complejos al poder explorarlos en primera persona. El enfoque inmersivo reduce las distracciones al captar completamente la atención del estudiante. Además, ofrece experiencias imposibles de recrear físicamente, como viajar al espacio o al interior del cuerpo humano.

Aprendizaje activo: la participación del alumno se vuelve protagonista cuando se le invita a interactuar con los contenidos. Los estudiantes toman decisiones, resuelven problemas y exploran caminos alternativos. Se desarrollan habilidades clave como el pensamiento crítico, la colaboración y la creatividad. El aprendizaje se refuerza al vivirse como experiencia, no como teoría memorizada.

Inclusión y personalización: estas tecnologías permiten adaptar el ritmo y estilo de aprendizaje a cada estudiante. Con la accesibilidad mejorada, más alumnos pueden involucrarse activamente en el aula. También benefician a quienes enfrentan barreras físicas, cognitivas o sensoriales. La RA y la RV rompen límites geográficos y socioeconómicos, y amplían las oportunidades de acceso a contenidos de calidad.

Verónica Arteaga, People and Culture Manager en Softtek EMEA, explica: "la transformación digital debe incluir la educación, ya que es clave para el desarrollo social. La Realidad Aumentada y la Realidad Virtual ofrecen métodos de aprendizaje más efectivos, inclusivos y adaptados a cada estudiante. Apostar por estas tecnologías es preparar a las nuevas generaciones para un futuro digital y globalizado".