"Si se ejerce una tensión excesiva al recoger el pelo con gomas u horquillas, puede causar alopecia por tracción, una forma de pérdida capilar reversible si se detecta a tiempo, pero que puede ser permanente si persiste el daño", explica la doctora Raquel Amaro, de Hospital Capilar
Hay que prestar especial atención a hábitos como una alimentación desequilibrada; dormir con el cabello mojado; el uso excesivo del calor; peinarse con fuerza o con el cabello mojado; el estrés crónico y obviar o normalizar la presencia de caspa
Con la vuelta a la rutina, son muchos los que retoman sus hábitos diarios en lo que al cuidado capilar se refiere. Sin embargo, tal y como señalan desde Hospital Capilar, la mayor corporación del sector capilar, explican que existen varias prácticas habituales que pueden estar dañando el cabello, aunque no lo sepamos.
Los productos de fijación capilar
En sí, el uso de productos de fijación, como geles, lacas, espumas o ceras, no son perjudiciales por sí mismos para la salud capilar, pero es aconsejable que se retiren siempre adecuadamente y se mantenga una correcta higiene de cuero cabelludo, explican desde Hospital Capilar.
"El principal problema del uso de estos productos podría surgir cuando se acumulan en el cuero cabelludo y este no se lava con regularidad, ya que pueden generar inflamación en el mismo o incluso favorecer procesos de dermatitis seborreica", expone la doctora Raquel Amaro, de Hospital Capilar.
De hecho, el exceso de aplicación de productos capilares puede ser perjudicial para el crecimiento y la salud del cabello. De este modo, su uso de forma inadecuada o no retirar correctamente el producto puede llevar a problemas como:
Obstruccio´n e inflamacio´n de los foli´culos: Los residuos que dejan productos como las ceras (si no se mantiene una higiene adecuada) pueden taponar el poro, favoreciendo por ejemplo la aparicio´n de inflamacio´n (foliculitis).
Alergia: Algunos ingredientes, (como las fragancias o parabenos) pueden desencadenar alergias o irritaciones (dermatitis de contacto).
Dermatitis seborreica: Su uso excesivo y el no mantener una correcta higiene puede comprometer la barrera cuta´nea, alterar el microbioma y favorecer la sequedad o el exceso de sebo.
El uso de horquillas y gomas
Utilizar horquillas y gomas, como tal, no suponen un problema a nivel capilar por sí mismas, pero sí que hay que tener cuidado con la tensión que se ejerce al recoger el pelo con estos objetos.
"Es importante prestar atención a esto, ya que, si se ejerce una tensión excesiva al recoger el pelo, puede causar alopecia por tracción, una forma de pérdida capilar reversible si se detecta a tiempo, pero que puede ser permanente si persiste el daño", subraya la doctora Amaro.
El lavado del cabello
Uno de los hábitos que genera más debate es la frecuencia con la que se debe lavar el cabello, pero, tal y como apunta la doctora de Hospital Capilar, la frecuencia de lavado depende del estilo de vida de cada persona y del tipo de cuero cabelludo o grado de seborrea del mismo.
"Es esencial romper el mito de que es perjudicial o que provoca más caída lavarse el pelo a menudo. En términos generales, aunque hay que individualizar cada caso, es importante lavarse el cabello de forma frecuente, incluso de forma diaria sobre todo en caso de practicar deporte que implique sudoración intensa de forma diaria", añade la doctora Amaro, de Hospital Capilar.
Otros hábitos diarios
Por último, como sostiene la doctora Raquel Amaro, podemos encontrar varios hábitos cotidianos que podrían dañar el cabello sin que las personas sean conscientes de ello:
Alimentacio´n desequilibrada. El estado de nuestro pelo depende mucho de la dieta. En concreto podri´an influir negativamente el consumo excesivo de grasas saturadas o los posibles de´ficits nutricionales derivados de una dieta poco saludable. Carencias en hierro, zinc, biotina o protei´nas afectan directamente al ciclo de crecimiento capilar.
Dormir con el cabello mojado. El pelo mojado es ma´s fra´gil, por lo que la friccio´n puede dar lugar una mayor rotura del mismo. Adema´s, la humedad prolongada en cuero cabelludo puede favorecer el crecimiento de hongos (como Malassezia).
Uso excesivo de calor (secadores, planchas, rizadores) Estos provocan fracturas en el tallo y deterioro de la cuti´cula.
Peinarse con fuerza o con el cabello mojado. Como he dicho, el cabello mojado es ma´s de´bil; por lo que un cepillado agresivo puede arrancarlo o partirlo con facilidad.
Estre´s cro´nico. El estre´s cro´nico en el que estamos inmersos en el di´a a di´a puede desencadenar procesos de efluvio telo´geno (cai´da exacerbada del cabello).
Obviar o normalizar la presencia de caspa (dermatitis seborreica). El desequilibrio inflamatorio en el cuero cabelludo afecta negativamente al ciclo folicular.
