ASHO refuerza su apuesta por la inteligencia artificial para transformar la codificación médica en España
La compañía trabaja con hospitales de todo el país para automatizar el tratamiento de informes clínicos y mejorar la eficiencia del sistema sanitario gracias a modelos de IA que permiten anticiparse a la demanda asistencial
“Nuestra labor consiste en recuperar los informes que se quedan sin codificar y aportar un valor extra a la información clínica”, afirma Gonzalo Hernández Ortega, experto en IA de ASHO
En un contexto donde la cantidad de datos clínicos crece a un ritmo imparable, la codificación médica se ha convertido en un reto clave para los centros sanitarios. Los equipos profesionales, pese a su preparación, no siempre pueden asumir el volumen total de información generada, lo que obliga a priorizar y dejar fuera informes y documentos clínicos que también contienen datos relevantes para la gestión hospitalaria.
Ante esta situación, la inteligencia artificial se presenta como una herramienta estratégica para aliviar esta carga y dar un salto cualitativo en la gestión de la información médica. ASHO, compañía líder en codificación sanitaria, avanza en el desarrollo de modelos automáticos de codificación basados en IA, capaces de analizar grandes volúmenes de documentación clínica en poco tiempo, respetando la privacidad del paciente y mejorando la toma de decisiones.
“En España estamos en una fase de implantación aún desigual. Hay muchos centros que evolucionan de forma dispar. Desde ASHO estamos trabajando en la integración de nuestros modelos en distintos hospitales”, explica Gonzalo Hernández Ortega, experto en inteligencia artificial de la compañía.
La IA permite procesar informes que hoy quedan fuera del sistema, añadiendo valor clínico y optimizando la gestión de la información hospitalaria
Uno de los principales objetivos del uso de inteligencia artificial en codificación es cubrir las lagunas del sistema actual. “En la práctica, se codifica solo lo estrictamente necesario, pero muchos informes se quedan sin tratar. Nuestra labor consiste en recuperar esa información desatendida y aportar un extra de valor a los datos que ya se están utilizando”, detalla Hernández Ortega.
Esto permite no solo mejorar la calidad de los datos codificados, sino también enriquecer el análisis clínico, la evaluación de resultados y las políticas de salud pública, facilitando que los hospitales trabajen con una visión más completa de cada paciente y del entorno clínico general.
De la reacción a la anticipación: la IA como puerta a una planificación sanitaria proactiva y predictiva
ASHO también apuesta por una transformación más profunda: pasar de un modelo de gestión reactivo a uno proactivo y predictivo. Gracias a la IA, los hospitales pueden empezar a anticiparse a la presión asistencial o a los cambios en la demanda de servicios.
“Vamos a pasar de un proceso de absorción de todo lo que llega, a un sistema capaz de anticiparse. Por ejemplo, podemos predecir la tasa de ocupación hospitalaria o ajustar recursos en función de las necesidades futuras”, señala el experto.
Este tipo de capacidades tiene aplicaciones directas en la planificación de personal, la gestión de camas, la programación de intervenciones o el control de enfermedades estacionales, como la gripe o la COVID-19. Además, al optimizar recursos y tiempos, se contribuye a reducir listas de espera y a mejorar la experiencia tanto de los profesionales sanitarios como de los pacientes.
ASHO aplica un protocolo de anonimización reforzado para garantizar la seguridad de los datos clínicos tratados por sus modelos de IA
La compañía también ha desarrollado un protocolo de anonimización reforzado para garantizar la privacidad de los datos. “Los hospitales nos envían los informes ya anonimizados, pero además aplicamos dos filtros adicionales: primero eliminamos partes sensibles mediante un sistema tradicional, y después utilizamos un algoritmo de IA que borra cualquier rastro de información personal”, señala Hernández Ortega.
Con esta doble capa de protección, ASHO garantiza que todos los modelos puedan trabajar con información útil sin comprometer la seguridad del paciente, cumpliendo con los más altos estándares de protección de datos en el ámbito sanitario.
Codificación más ágil, decisiones más informadas
La integración de inteligencia artificial en los sistemas hospitalarios no solo mejora la eficiencia operativa, sino que también permite generar informes más completos, automatizar procesos que antes requerían días de trabajo manual y disponer de cuadros de mando más precisos para tomar decisiones clínicas y de gestión.
“Estamos ayudando a que la codificación deje de ser una tarea puramente técnica y se convierta en una herramienta estratégica para todo el sistema sanitario”, concluyen desde el equipo de IA de ASHO.
Con esta visión, ASHO sigue liderando la transformación digital del sector salud, poniendo la inteligencia artificial al servicio de un modelo sanitario más eficiente, conectado y sostenible.
