Desde el pasado 22 de septiembre, ya están empezando a multar los semáforos llamados foto-rojo, son semáforos en los que se ha instalado una cámara que capta, mediante imagen, a los vehículos que se saltan un semáforo en rojo.

Aparentemente, si nos llega una sanción de estos foto-rojos lo primero que pensamos es que poco o nada podemos hacer para recurrir pues suelen acompañar la fotografía de la presunta infracción y tendremos que pagar 200,00 € y perder 4 puntos de nuestro carné de conducir.

Ahora bien, Pyramid Consulting, lleva años recurriendo este tipo de infracciones y ello porque "no todo vale", es decir, si bien puede existir una fotografía que pretenda acreditar la sanción, no es menos cierto que se han de guardar todas las garantías que prevé la ley y que amparan a los ciudadanos.

Hay diversos motivos de recursos respecto de estas sanciones como son:

Que la fotografía sea clara y la matrícula legible, aunque pueda parecer algo obvio, nuestra experiencia nos dice que no es siempre así teniendo que impugnar hasta en vía judicial dicha sanción ya que, en ocasiones, ni siquiera, la matrícula se lee de forma nítida en la fotografía.

Que en la fotografía se vea claramente el color rojo del semáforo. En muchas ocasiones, Pyramid Consulting ha impugnado sanciones en las que el semáforo está en fase ámbar, por lo que las mismas han terminado anulándose.

Que la cámara del semáforo cuente con garantías suficientes de su no manipulación, así como de su óptimo estado de funcionamiento pues no podemos perder de vista que no dejan de ser cámaras que están sujetas a cambios meteorológicos como lluvia, nieve o calor extremo que puede dañar su correcto funcionamiento.

"Llevamos años recurriendo con éxito este tipo de sanciones porque no todo vale. La Administración debe garantizar que la imagen sea clara, el semáforo esté efectivamente en rojo y el dispositivo esté homologado y en correcto funcionamiento", explica Yolanda Abad, abogada de Pyramid Consulting.

Estos son algunos de los argumentos, entre otros, que la firma hace valer tanto ante la Administración sancionadora como ante los juzgados. Por ello, desde Pyramid Consulting recomiendan consultar siempre con profesionales especializados antes de abonar la sanción, ya que una revisión jurídica puede determinar si la multa cumple con todas las garantías legales.