CSIT UNIÓN PROFESIONAL informa sobre la grave situación que afecta al personal y a los usuarios del Centro de Salud Los Rosales (Villaverde Bajo), donde, desde el pasado 8 de septiembre, se trabaja en condiciones térmicas inadecuadas debido a la avería del sistema de climatización.

Actualmente, las consultas registran temperaturas muy inferiores a los 20 °C que establece la normativa autonómica para los centros sanitarios entre el 1 de noviembre y el 1 de abril. Cabe recordar que la Orden de 11 de febrero de 1986, de la Consejería de Salud y Bienestar Social, por la que se desarrolla el Decreto 146/1985, de 12 de diciembre, establece que, obligatoriamente, en la Comunidad de Madrid todo centro asistencial dispondrá de servicio de calefacción que garantice una temperatura interior mínima de 20 grados durante ese periodo (del 1 de noviembre al 1 de abril).

En el centro de salud se han llegado a medir temperaturas inferiores a 15 °C, lo que resulta incompatible con la actividad asistencial habitual y afecta tanto a la plantilla como a los pacientes, con especial incidencia en las personas mayores, recién nacidos, lactantes, niños pequeños y pacientes con patologías crónicas.

Los profesionales se ven obligados a pasar consulta con abrigo y a adaptar su actividad diaria debido al frío. En Pediatría, el personal pesa a los bebés envueltos en mantas para evitar la exposición a temperaturas inadecuadas.

Desde el primer momento, los delegados de prevención de CSIT UNIÓN PROFESIONAL actuaron con diligencia:

Tras la alerta de los profesionales del centro de salud, el 12 de septiembre se realizó una visita en la que se constató el disconfort térmico y los riesgos asociados a las medidas improvisadas. Se elaboró un informe técnico que se comunicó posteriormente a la Dirección Técnica de Obras y Mantenimiento, a la Dirección Asistencial Centro y al SPRL (Servicio de Prevención de Riesgos Laborales) de la Gerencia de Atención Primaria del SERMAS, solicitando actuaciones urgentes.

El 18 de septiembre, en el Comité de Seguridad y Salud de la Dirección Asistencial Centro, se denunció la instalación de dispositivos portátiles conectados de forma irregular al falso techo, lo que generaba riesgo de incendio y problemas de salubridad.

El 25 de noviembre se volvió a exigir la adopción de soluciones ante el nuevo riesgo derivado de las bajas temperaturas.

Fruto de las actuaciones de CSIT UNIÓN PROFESIONAL, la Gerencia de Atención Primaria se vio obligada a adoptar una decisión definitiva que pasaba por sustituir el sistema actual de climatización. Esta decisión implicó la tramitación de un concurso público para la adquisición del nuevo equipo y, una vez adjudicado, se ha fijado la instalación para el 19 de diciembre de 2025.

Mientras tanto, la solución temporal adoptada por la gerencia ha sido facilitar calefactores para las consultas. Sin embargo, ante la falta de previsión, se ha excedido la capacidad de generar fluido eléctrico, ocasionando problemas técnicos. Estos problemas han surgido por una falta de planificación que no se justifica desde septiembre hasta la fecha actual. Teniendo en cuenta que la solución definitiva no se iba a producir hasta diciembre, debería haberse previsto la necesidad de establecer medidas temporales adecuadas, considerando que, a partir de octubre, las temperaturas en las consultas estarían por debajo del umbral permitido.

Si entre las medidas se contemplaba la instalación de calefactores portátiles para calentar el ambiente, se tendría que haber calculado el aumento de consumo eléctrico y dimensionado adecuadamente la infraestructura del centro para evitar el colapso de la red eléctrica que se está produciendo en la actualidad. Esta situación ha motivado que no se pueda aplicar correctamente la medida temporal y que los trabajadores ejerzan su actividad en condiciones inadmisibles a nivel de climatización.

CSIT UNIÓN PROFESIONAL ha contribuido de forma decisiva a la solución definitiva, prevista para el 19 de diciembre, mediante la presión ejercida ante los órganos competentes y la actuación constante de sus delegados de prevención.

Exigimos que se refuercen los protocolos de mantenimiento y prevención para evitar que situaciones como esta vuelvan a repetirse, poniendo en riesgo la salud laboral y la calidad asistencial. Confiamos en que las incidencias descritas en esta nota no vuelvan a producirse, con el fin de evitar cualquier perjuicio a los verdaderos protagonistas del sistema sanitario: los pacientes y los profesionales.