Ganaderos de toda España alertan sobre la vulnerabilidad del sector: reclaman medidas preventivas y cuestionan las políticas sanitarias reactivas que aumentan el riesgo para la cabaña española.
Se necesita reforzar la relación sociedad-territorio, mejorar la comunicación sobre riesgos sanitarios y ambientales, y promover políticas que integren sostenibilidad, biodiversidad y prevención de enfermedades.
El Foro Reconcilia España ha destacado la importancia de reconectar sociedad y territorio, mejorar la comunicación sobre riesgos sanitarios y ambientales, y fomentar políticas integrales que protejan el sector ganadero y el medio rural.
Foro Reconcilia España celebrado por Legados en Casa América, Madrid
Madrid, 03 de diciembre de 2025 — La reciente detección de casos de Peste porcina africana (PPA) en jabalíes silvestres cerca de Barcelona ha reactivado un debate profundo sobre el modelo ganadero, la protección del medio rural y la relación de la sociedad española con la naturaleza. Este brote, que supone la primera aparición de la PPA en España desde 1994, no solo pone en jaque al sector porcino, sino que plantea preguntas urgentes sobre conservación, biodiversidad y soberanía alimentaria.
Más allá del impacto sanitario y económico, esta crisis ha puesto sobre la mesa una pregunta más profunda y determinante para nuestro futuro: ¿hasta qué punto nos hemos alejado —personal, cultural y políticamente— de la naturaleza que sostiene nuestra vida y nuestra alimentación? Este fue uno de los principales temas abordados en el foro que reunió a representantes públicos, empresarios, expertos y ciudadanos con el objetivo de acercar las realidades locales al debate político y social sobre el medioambiente.
"España es la tercera potencia mundial en el sector porcino, exporta el 90% de lo que produce y, además, esta crisis coincide con la crisis bovina y aviar, por lo que todo esto está provocando una crisis alimentaria que puede tener unas consecuencias muy negativas desde el punto de vista económico, social y sanitario", subraya Javier Dorado, director general de Legados, impulsores del foro.
La crisis ha reabierto el debate sobre la gestión del medio rural y la ganadería en España. En este contexto, el Foro Reconcilia España subrayó la importancia de reforzar la relación entre la sociedad y el territorio, mejorar la comunicación sobre riesgos sanitarios y ambientales, y apostar por políticas que integren sostenibilidad, biodiversidad y prevención de enfermedades.
En el Foro se puso de manifiesto que la realidad que hoy vive España evidencia la desconexión se nota en los niños que crecen sin saber de dónde vienen los alimentos ni cómo huele el campo cuando cambia la estación, y también en adultos que ven la naturaleza como un escenario ajeno y no como un ecosistema del que dependen su salud, su alimentación y su seguridad.
También se apuntó que los ganaderos —especialmente los de vacuno, porcino y avícola— viven cada vez más al límite. Tatiana Sánchez, representante de ganadería bravo-carnicera, lo definió en el foro Reconcilia España como "supervivencia pura". Las políticas sanitarias, decía, están actuando de manera reactiva en lugar de preventiva: "No se vacuna, no se anticipa. Y así, la cabaña española se queda más vulnerable que nunca".
A ello se suma la presión ambiental y regulatoria: el campo ha sido visto durante años como un problema, cuando en realidad, añadía Tatiana: "es biodiversidad y es protección frente a incendios; sin ganado, España ardería".
Además, la Real Federación Española de Caza (RFEC), señala que la caza, aplicada de forma regulada y técnica, es una herramienta eficaz para gestionar poblaciones como la del jabalí y reducir riesgos sanitarios asociados, incluida la propagación de la PPA. La entidad defiende que integrar al sector cinegético en las estrategias de gestión de fauna es clave para proteger tanto al medio rural como a la biodiversidad.
La crisis de la PPA ha coincidido además con semanas de tensión en el sector del huevo y las aves, afectado por incrementos de costes, menor producción y la amenaza de enfermedades que podrían provocar vacíos sanitarios. "La peste porcina no es un hecho aislado: estamos en medio de una gripe aviar que ha obligado a sacrificar el 5% de las gallinas en España y una dermatosis nodular que afecta muy negativamente también al bovino", añade el director general de Legados.
Muchos productores temen que la situación actual sea solo un anticipo de un fenómeno mayor: la pérdida definitiva de la cabaña ganadera española y la dependencia creciente de terceros países para alimentarnos. Una perspectiva que preocupa profundamente en un país donde un millón de personas viven directamente del campo y donde solo la ganadería aporta más de 28.000 millones al PIB.
"España produce anualmente alrededor de 5 mil millones de toneladas de carne porcina y esta crisis puede afectar de forma muy negativa a la economía del país ya que este sector es muy determinante dentro del sector primario español", concluye Javier Dorado.
La situación continúa bajo vigilancia, mientras las autoridades catalanas y nacionales implementan medidas de control y seguimiento para contener el brote y minimizar su impacto económico y sanitario.
