"Durante las dos últimas semanas he estado en Kandahar, Herat y ahora en Kabul. He visto el impacto directo de los combates, desde los niños y niñas heridos hasta los que están gravemente desnutridos. Puede ser difícil describir el ver a niños y niñas así, algunos tan jóvenes como de 10 meses.

La situación está mejorando en Kabul. La semana pasada, nuestro equipo fue a un campamento de desplazados internos y vio el trabajo allí de los equipos de salud móviles de UNICEF, aunque, como mencionó la Organización Mundial de la Salud (OMS), se ha detenido en los últimos días y, con suerte, se reanudará pronto. Hay una gran necesidad que debemos atender.

Cada día que pasa, el enardecido conflicto en Afganistán se cobra un precio mayor en las mujeres y los niños y niñas del país. De hecho, desde principios de año, más de 550 niños y niñas han muerto y 1400 han resultado heridos. Trágicamente, como dejó claro el quinto informe del secretario general de la ONU sobre los niños y los conflictos armados en Afganistán, las víctimas infantiles durante el primer semestre de este año constituyeron el mayor número de niños y niñas muertos y mutilados desde que la ONU inició los registros en Afganistán.

La mitad de la población, más de 18 millones de personas, incluidos casi 10 millones de niños y niñas, necesita ayuda humanitaria. Para todas estas personas, UNICEF pide acceso y todas las garantías de seguridad que conlleva dicho acceso.

Afganistán ha sido, durante muchos años, uno de los peores lugares del mundo para ser niño. En las últimas semanas ha empeorado. Mientras hablamos, si no actuamos de inmediato, la predicción de UNICEF para 2021 es que uno de cada dos niños y niñas (menores de 5 años) sufrirá desnutrición grave. UNICEF está cada vez más preocupado por el aumento de violaciones graves, especialmente el reclutamiento de niños y niñas por parte de grupos armados. Instamos nuevamente a los talibanes y a todas las demás partes a que cumplan sus obligaciones en virtud del Derecho Internacional Humanitario y el Derecho Internacional de los Derechos Humanos, y protejan la vida y los derechos de todas las personas, incluidas las mujeres y las niñas.

Incluso ante la escalada de la crisis, el trabajo de UNICEF por los niños y las familias en todo el país continúa. Mientras hablo en este momento, tenemos a nuestro director de Emergencias y a nuestro director regional en Kabul, quien aterrizó hace dos días. Están aquí porque UNICEF pide un acceso inmediato y sin obstáculos a las zonas de difícil acceso, para que podamos brindar el apoyo que la población afgana tanto necesita, especialmente quienes pagan el precio más alto: mujeres y niños.

Continuar con este trabajo y nuestro apoyo a las mujeres y los niños de Afganistán es tan importante como siempre. Se debe poner fin a las violaciones, se deben proteger los derechos de las niñas conseguidos con tanto esfuerzo, incluido el acceso a la educación, y se debe proporcionar ayuda humanitaria a los millones de niños que lo necesitan".