Con los votos en contra de los concejales socialistas y de Ciudadanos, no fue admitida a trámite en el reciente Pleno del 30 de enero la moción del PP proponiendo la defensa del Trasvase Tajo-Segura ante los continuos ataques, amenazas y atentados contra el Levante español, perpetrados por el Gobierno de Pedro Sánchez y en especial sobre una infraestructura hidráulica tan vital para el bienestar y el futuro de millones de personas de Murcia, Alicante y Almería.

Desde el PP venimos alertando de que el recorte al Trasvase de Pedro Sánchez perpetrado por su Consejo de Ministros no viene respaldado por criterios técnicos, sino que se trata de una decisión política. 

Los populares siempre hemos reivindicado que, para eludir este ataque, se mantuvieran las actuales reglas de explotación y así evitar que se reduzcan las transferencias entre 70 y 110 hectómetros cúbicos durante los próximos cinco años como así se ha decidido ahora en la Moncloa.

Es hipotecar el futuro de la Región de Murcia y de sus ciudadanos, así como poner en peligro más de 140.000 empleos. 

Una amenaza que se cumple por el Visto Bueno que la Moncloa ha dado a este recorte que es más bien la muerte anunciada del Trasvase Tajo-Segura. 

Un atentado al porvenir de los murcianos que afectará a nuestros bolsillos en algo tan evidente y cotidiano como va a ser el encarecimiento del precio del agua para consumo en 13,3 millones de euros anuales. A lo que se suma, según los datos recogidos en un informe de la Universidad de Alicante, un daño patrimonial estimado en abastecimiento y regadíos de 5.700 millones de euros.

Con este hachazo del Gobierno Sánchez al Trasvase se ve la hoja de ruta de la Moncloa, que es la de acabar con un recurso hídrico necesario y que por Ley corresponde al Levante, rompiendo el consenso en materia hidrológica, perjudicando a tres millones de españoles y penalizando a las regiones que sí son eficientes en el uso del agua y modélicas en su tratamiento y depuración.

Es así que Pedro Sánchez y sus 22 ministros son los responsables del mayor ataque a nuestra tierra.  

Frente a la política de imposición, de falta de diálogo y consenso de Pedro Sánchez, que ha generado un problema a dos millones y medio de españoles por recortar el Trasvase sin criterios técnicos o científicos que lo avalen:  

-El presidente Feijóo se ha comprometido en la Región de Murcia a no actuar cómo lo está haciendo el Gobierno de Pedro Sánchez. 

Además de: 

- No decidir nunca con criterios ideológicos o partidistas, sino con criterios basados en el máximo rigor.  

- A tratar el tema del agua como un asunto de Estado, porque no es un problema de la Región de Murcia: si una parte del territorio no tiene agua es un problema de los españoles.  

- Se ha comprometido a impulsar un Pacto Nacional del Agua que conlleve un plan de infraestructuras de agua en el que se cuente con todos, que incluya una nueva planificación hidrológica nacional para dar respuesta a las necesidades.  

López Miras peleará, junto al millón y medio de ciudadanos de la Región, por la continuidad del Trasvase frente a Sánchez.  

Hoy es más urgente que nunca un Plan Hidrológico Nacional que ponga fin a lo que algunos califican de guerra y que no es más que el fruto del sectarismo del Partido Socialista.