Tras varios días de inestabilidad, con tormentas que continuarán hasta el domingo, en los primeros días de la próxima semana ya no lloverá

Esta calma será breve, pues el mes de mayo podría terminar "pasado por agua

En los primeros días de la semana que viene una masa de aire cálido progresará sobre la Península Ibérica.

A pesar de que el mes de mayo comenzó muy soleado y con temperaturas máximas anormalmente altas, sobre todo en el pasado fin de semana, la inestabilidad generalizada y el desplome de las temperaturas están siendo los protagonistas.

Para mañana viernes y el sábado este panorama variará muy poco, ya que la lluvia estará presente en casi todo el territorio nacional y el ambiente será fresco. Las temperaturas máximas superarán ligeramente los 20 °C en zonas de Extremadura, valle del Guadalquivir, Costa del Sol, Región de Murcia y en la Comunidad Valenciana. Las mínimas marcarán 5 o 6 °C en amplias zonas de la meseta norte y el este de Castilla La Mancha, llegando incluso a valores negativos en las cumbres de Sierra Nevada.

El domingo quedarán restos de inestabilidad en Cataluña, sur de Aragón, Baleares, Comunidad Valenciana, Murcia, sur de Castilla La Mancha y este de Andalucía, que depararán chubascos tormentosos.

Breve calma para la próxima semana

La semana que viene empezará con grandes claros entre pinceladas de nubes altas en España, sin previsión de lluvia. Las temperaturas diurnas subirán en todas las regiones, llegando a superar los 30°C en el valle del Guadalquivir y en Extremadura.

Entre el jueves, día 21, y el lunes 25, uno o dos frentes poco activos darán origen a precipitaciones en general débiles, más probables en las regiones cantábricas, el alto Ebro y los Pirineos.

Final de mes otra vez inestable

Atendiendo al modelo ECMWF, la última semana del mes podría deparar precipitaciones ligeramente superiores a las normales para esas fechas en la mitad sur peninsular, la meseta castellanoleonesa, el sur de Aragón y las islas occidentales del archipiélago canario.

José Antonio Maldonado recomienda, como siempre, cautela ante las predicciones a largo plazo.