Delegados del Sindicato de Técnicos de Enfermería (SAE), procedentes de toda España, se concentrarán el día 25 de marzo a las 12 de la mañana frente a la sede del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones (C/José Abascal, 39) apoyando así la convocatoria de la Plataforma Jubilación Anticipada Voluntaria en Instituciones Sanitarias y Sociosanitarias (JAVIIS)
Desde hace tiempo, una de las reivindicaciones de SAE es la reducción de la edad de jubilación voluntaria sin penalizar para estos trabajadores. De hecho, este fue también uno de los puntos por lo que más de 8.000 profesionales se manifestaron el pasado 24 de febrero en Madrid. Asimismo, SAE ha ejercido, ya en dos ocasiones, su Derecho de Petición a la Secretaría de Estado de la Seguridad Social y Pensiones solicitando el inicio de los estudios necesarios para el reconocimiento de la profesión sanitaria como profesión de riesgo y, por lo tanto, la reducción de la edad de jubilación a los 60 años.
El artículo 206 del texto refundido de la Ley General de la Seguridad Social prevé que la edad mínima de 65 años exigida para tener derecho a pensión de jubilación podrá ser rebajada por Real Decreto, a propuesta del Ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, en aquellos grupos o actividades profesionales en las escalas, categorías o especialidades cuyos trabajos sean de naturaleza excepcionalmente penosa, tóxica, peligrosa o insalubre y acusen elevados índices de morbilidad o mortalidad. Los profesionales sanitarios y sociosanitarios están dentro de estas categorías, pues en su trabajo diario se enfrentan a riesgos para su salud al estar expuestos a posibles infecciones, radiaciones y productos tóxicos. De hecho, cada vez es mayor el número de profesionales que desarrollan afecciones de diferente evolución y sintomatología, como es la Sensibilidad Química Múltiple (SQM) por la exposición continuada a sustancias tóxicas, aerosoles e infinidad de químicos a los que los sanitarios se exponen a diario en el ejercicio de sus funciones.
También sufren el desgaste físico, psíquico y social que conllevan los turnos rotatorios y nocturnos, la fatiga mental, la escasez de personal, el envejecimiento de la población, en su mayoría dependientes/grandes dependientes, y la presión asistencial. Todas estas tensiones, implicación y esfuerzos deterioran la salud y provocan altos índices de morbilidad y, por lo tanto, de absentismo.
El derecho al establecimiento de coeficientes reductores para los profesionales sanitarios y sociosanitarios, tal y como ya tienen reconocido otras profesiones, es una de las reivindicaciones que SAE abandera desde hace años, "por lo que consideramos fundamental el apoyo de todos los agentes sociales y representantes de los trabajadores implicados, pues solo así conseguiremos una unión fuerte que obligue al Gobierno a cumplir con el Real Decreto 8/2015, de 30 de octubre, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley General de la Seguridad Social, que recoge que la edad de jubilación podrá rebajarse en los grupos o actividades profesionales cuyos trabajos sean de naturaleza excepcionalmente penosa, tóxica, peligrosa o insalubre", explica Isabel Lozano, Secretaria de Organización de SAE.
Pero, además, el Gobierno debe tener en cuenta que la mobilidad y mortalidad por enfermedad y su relación directa con el trabajo, o la incapacidad permanente derivada de enfermedad laboral, se producen de manera constante y en un grado superior a otras profesiones, lo que debería impulsar el reconocimiento de este derecho.
