El ministro de Sanidad ha significado la importancia de la colaboración público-privada en la puesta en marcha de iniciativas como el futuro Plan Estratégico de la Industria Farmacéutica o el PERTE para la Salud de Vanguardia.
El ministro de Sanidad, José Miñones, ha subrayado el papel clave que ha desempeñado la industria farmacéutica en la lucha contra la pandemia provocada por la COVID-19 con el desarrollo, entre otros, de las vacunas frente al SARS-CoV-2.
Así lo ha significado durante su intervención, este jueves, en el acto de inauguración del Centro Internacional de Excelencia de la multinacional farmacéutica Moderna en Europa, en Madrid.
El ministro de Sanidad ha puesto en valor el desarrollo de soluciones médicas con ARN mensajero (ARNm) en la lucha contra el cáncer, las enfermedades raras o las vacunas que Moderna ha desarrollado frente a la COVID-19 y que han contribuido a que España alcance uno de los niveles de cobertura vacunal más altos del mundo.
La vacunación, ha remarcado Miñones, ha sido un "logro de país"; un proceso histórico, basado en la cogobernanza y el criterio experto, sustentado en un proceso de compra comunitaria sin precedentes en la UE, en el liderazgo del Gobierno de España, la colaboración constante con las Comunidades Autónomas, el compromiso de los profesionales sanitarios y el comportamiento ejemplar de la ciudadanía del país.
Gracias a ello, ha explicado, a día de hoy nuestro país cuenta con más de 105 millones de dosis administradas, un 92,7% de la población mayor de 12 años con pauta completa y más de 26 millones de personas con dosis de refuerzo, además de haber donado 70 millones de dosis a terceros países.
Colaboración público-privada
El ministro de Sanidad también ha significado la importancia de la colaboración público-privada a la hora de planificar y desarrollar iniciativas como el futuro Plan Estratégico de la Industria Farmacéutica o el PERTE para la Salud de Vanguardia.
Iniciativas que no sólo facilitan el desarrollo del sector farmacéutico en nuestro país, sino que aseguran a su vez el abastecimiento y la equidad en el acceso a los nuevos tratamientos y la sostenibilidad del sistema sanitario, además de facilitar el desarrollo en áreas como la innovación, el impulso a las cadenas de suministro o el refuerzo de las necesidades estratégicas del sector.
En este sentido, ha defendido la necesidad de trabajar a favor de una industria farmacéutica fuerte y con la capacidad para afrontar futuras crisis desde la I+D+i y la generación de empleo de calidad, y que, al mismo tiempo, vaya de la mano de un sistema de salud público como pilar básico del Estado del Bienestar, con la salud como derecho fundamental y de un sistema que proteja a los más vulnerables.
Asimismo, Miñones ha recordado el debate y desarrollo de un nuevo marco regulador para el sector farmacéutico que tendrá lugar durante los meses en los que España ostentará la Presidencia del Consejo de la Unión Europea.
Una reflexión en la que, ha asegurado, España seguirá trabajando a favor de la autonomía estratégica sanitaria de la UE con el objetivo de seguir reforzando los mecanismos de preparación y respuesta ante futuras alertas sanitarias y dotar construir un ecosistema estable, innovador y sostenible que no dependa de terceros países.
Un proyecto con enorme potencial
El ministro de Sanidad ha tenido asimismo palabras de reconocimiento hacia Moderna y el proyecto de excelencia que hoy comienza su andadura en Madrid; "un proyecto extraordinario con un enorme potencial para mejorar la vida y la salud de las personas" que sitúa a nuestro país como "punta de lanza a nivel europeo".
Además, con estas instalaciones, entre las que se encuentran unidades de microbiología o bioensayos, Moderna redobla su apuesta por España, siendo el único país de Europa capaz de producir y fabricar medicamentos basados en ARNm, para su distribución territorial en España y otros 60 países del mundo, ha recordado el ministro.
El ministro de Sanidad, José Miñones, junto al resto de autoridades que han asistido al evento
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