
En el pleno ordinario del Ayuntamiento correspondiente al pasado mes de enero, el Grupo Municipal de VOX presentó una batería de enmiendas a la Ordenanza de aparcamiento elaborada por el equipo de Gobierno del PP. Ninguna de las enmiendas fue aceptada por este equipo de Gobierno.
El Grupo Municipal de VOX advierte que, de permanecer con su actual redacción esta Ordenanza de aparcamiento que regula la antigua ORA en la ciudad de Murcia, (ya con la denominación de Servicio de Estacionamiento Regulado, SER), que ya ha sido aprobada inicialmente en el pleno de enero por la mayoría municipal del PP, y de ser aplicada, se producirán graves e inmediatos perjuicios para los murcianos, al no responder la nueva Ordenanza a la búsqueda de beneficio alguno en servicios, calidad de vida o facilitación de su actividad, derechos u obligaciones, contraviniendo el interés general y recortando derechos a los que menos tienen.
La nueva ordenanza no mejora sino que empeora la calidad de vida de los murcianos, dificultando aún más el aparcamiento en toda la ciudad cuando por las obras de movilidad ya se habían eliminado 2.000 plazas sin ser repuestas y sin que se haya construido ni uno solo de los anunciados parkings disuasorios.
La nueva ordenanza no mejora sino que empeora la economía diaria de los murcianos, encareciendo arbitrariamente el aparcamiento, hasta extremos prácticamente confiscatorios, constriñendo aún más la posible clientela del comercio en el centro de la ciudad y sus proveedores e impidiendo que los ciudadanos de pedanías puedan acceder a su ciudad con unas tarifas y tiempos mínimamente razonables.
La nueva ordenanza no mejora sino que empeora la contaminación en el centro urbano, al aumentar el tráfico de vehículos en una zona ya colapsada por el fracasado y caótico Plan de Movilidad del propio equipo de Gobierno y quiere expandir el caos en círculos concéntricos hasta pedanías de forma desigual e injusta.
La nueva ordenanza no mejora sino que empeora las condiciones de la sociedad murciana en su conjunto, ya que muchos ciudadanos tendrán que pagar en barrios y pedanías donde hasta ahora no se pagaba nada y deberán abonar una tarifa abusiva simplemente por acudir a los centros de trabajo o de salud, o a un hospital, una medida desproporcionada.
En definitiva, para VOX la nueva Ordenanza de aparcamiento es contraria al interés general de los ciudadanos de Murcia, ya ha sido rechazada incluso en barrios y distritos con mayoría de vocales del PP, como en Distrito Norte, que comprende los barrios de San Basilio, El Ranero, San Andrés y San Antón, y sólo responde a un único criterio, que es el de extraer más dinero de los bolsillos de los murcianos, debido a la quiebra a la que los mismos que ahora Gobiernan han conducido al Ayuntamiento.
Concejal José Mariano Orenes: "El PP ha aprobado una ordenanza de aparcamiento de espaldas a los murcianos y que tiene unas tarifas de evidente carácter recaudatorio, prueba de ello es la cantidad de alegaciones y recogidas de firmas y quejas que se están registrando y que nos están haciendo llegar los vecinos de barrios y pedanías. Se pone de manifiesto que esta ordenanza no se ha hecho con sentido común".
"El único motivo de esta ordenanza contraria al interés general de los ciudadanos es sacar el dinero de los murcianos debido a la quiebra a la que han llevado al ayuntamiento", denuncia el concejal de VOX.
Concejal María Guerrero: "se han presentado iniciativas en todas las juntas de barrios y pedanías para pedir la paralización de esta ordenanza mientras se presentan todos los estudios obligados por ley y se somete a publicidad ante los ciudadanos para que presenten sus alegaciones. Estamos en contra totalmente de esta medida, no responde a ninguna necesidad real de los ciudadanos; los vecinos de pedanías y barrios necesitamos más inversiones y más servicios, no necesitamos el afán recaudatorio del Partido Popular".
VOX exige la inmediata paralización de la ordenanza de aparcamiento regulado mientras ésta se somete a los preceptivos pasos y estudios de impacto establecidos en la Ley, porque, de otra manera, "los daños que se van a producir de aplicar esta ordenanza contra el interés general de los murcianos y completamente de espaldas a ellos puede ser irreparable".