¿La racionalidad moral se ha perdido?

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¿La racionalidad moral se ha perdido?

¿Una racionalidad prudente y racional, en los campos psicológicos y morales se ha perdido, en gran parte, en Europa? ¿Hemos caído en una anomia y anarquía y amoralidad y antimoralidad moral/ética en gran parte? 

Cómo es lógico y racional, según una razón prudente y basada en hechos y datos, en una ortodoxia del saber de contenidos o conceptos que abarcan y abarquen multitud de campos, y, desde una ortodoxia, racional y prudente, de lo ético y lo moral. Podemos preguntarnos, quizás, lo que pocos quieran hacerlo, si una parte fundamental de las sociedades europeas e ibéricas, hemos caído en una anomia y anarquía y antimoralidad y amoralidad ética y moral. 

Plantear esta pregunta o este conjunto de cuestiones, es echarse en contra a todo el mundo. Pero un artículo tiene muchas funciones y finalidades. El que no quiera, no lo lea, no se acerque a él, y, lo rechace como si fuese la peste negra de 1347-1349.. Pero si, usted es una persona razonable y que observa la realidad, quizás, si deba intentar plantearse, no las soluciones que puedan derivar de esta ristra y conglomerado de frases e ideas e imágenes, pero si preguntas y cuestiones… 

El ser humano, en general, no sabemos en qué proporción, al perder el norte prudente de una moralidad y ética adecuada y correcta, un producto creado e inventado y digerido durante siglos y milenios. Todavía, no totalmente desaparecido. Pero si herido gravemente. Al ir quitándose de la moral colectiva y pública e individual, una parte de esa herencia cultural psicológica y moral-ética de siglos y milenios, que por los sucesivos pasos, como una piedra se ha ido redondeando, durante generaciones y generaciones.. Al haber olvidado dichas realidades morales y psicológico morales, el ser humano ha caído en una especie de anarquía moral y anomia moral, sea denominado escepticismo moral, materialismo moral, relativismo moral, hedonismo moral, y, todos los nombres antiguos, actualmente en forma de “neo”, y, todas las derivaciones actuales… 

Es cierto, que los sistemas jurídicos, en parte y en gran parte, como no podría ser de otro modo, siguen fundamentándose los sistemas de derechos y éticos morales jurídicos, derivados y potenciados e inspirados en esa moral y ética que viene de los griegos, pasando por los romanos tomando, grandes dosis en el Antiguo Testamento y en el Nuevo Testamento. Esta es la realidad, que los grandes pilares del sistema social, a nivel jurídico, todavía, con excepciones, en determinadas reglas tiene esas fuentes. Y, si no tuviese esos pilares-fundamentos-raíces, posiblemente, esta civilización habría desaparecido del todo… -cosa a la que nos podemos ir encaminando, a pasos agigantados, si no deseamos rectificar, individual y colectiva y socialmente, o seremos sustituidos por otras sociedades-civilizaciones con una ética, más acordes con la realidad humana…-. Pregunto y enuncio y planteo y me angustia dichas cuestiones… 

Pero a nivel de ética psicológica y psicología moral, de parte de los individuos, colectivos, grupos que respiran o respiramos por esta sociedad de hoy, en Europa, hay que preguntarse, que hemos caído en errores morales graves. Cierto es, que quizás, salvo excepciones de excepciones, nadie se salta toda las reglas morales mínimas, de sentido común, de una ética de siglos, que ha ido depurándose por mil vicisitudes. Sino, con una imagen y concepto más fácil. Si durante siglos se ha admitido los siete errores morales graves o los siete pecados capitales. 

Capitales porque son la cabeza de muchos errores psicológicos y morales, no solo son los errores de ese principio o concepto o práctica, o todos a la vez, sino que eso acarrea otros problemas y otras problemáticas. No todo el mundo, salvo, quiero creer, alguna excepción de excepción, cae en cada uno de los siete pecados capitales, sino en uno o en dos. Y, así, sucede, que unos de nosotros caemos, en unas faltas graves de uno o de dos de esos errores morales graves, y, otros caemos, en otros. Así, nosotros medio justificamos nuestras heridas morales y psicológico éticas, pero no podemos entender las de los otros. Nosotros, en nombre de la libertad, de teorías erróneas, de la autoidentidad, de la autonomía personal y de mil principios semejantes, que en sí, pueden ser buenos y correctos, pero que mal utilizados son la fuente de enormes males psicológicos morales (a nivel personal, familiar, laboral, social, estatal, cultural, espiritual, etc.). 

Unos, caemos en la lujuria, otros caen en la envidia, otros en la avaricia-codicia, aquellos en la soberbia y la vanidad, los de al lado en la gula (léase ebriedad en algunas de sus formas o maneras…), otros en ataques de ira-cólera, etc. Concretizar y materializar los casos posibles, los árboles en los que se desarrollan los errores morales, sería ilimitado. Supondría que las personas leyesen manuales de ética, manuales de moralidad cristiana… porque entre otras realidades, es el alejamiento de la columna vertebral de Europa, que es y ha sido el cristianismo y la ética del cristianismo. Nos guste o disguste esa es la realidad histórica… 

Pero esta anomia y anarquía moral, cada uno se hace una moral como en un supermercado, cada uno selecciona los productos que quiera (de pasada, y para quitar gravedad al tema, me gustaría saber, a partir de diez productos, cuántas veces, se produce que alguien, selecciones diez o quince o veinte productos, que sean iguales, cuánto tiempo se tarda, problema matemático…). Lo mismo sucede en moral, cada uno se hace una moral a su gusto, sin pensar lo suficiente, la racionalidad y la moralidad correcta… 

Habiendo distendido el artículo, hay que preguntase, guste o no guste: ¿esta etapa de amoralidad e inmoralidad, que demasiados individuos hemos caído, demasiado colectivos, lo que nos produce es más desequilibrios psicológicos, y, a más desequilibrios psicológicos más desequilibrios morales, y, viceversa? –El grado de responsabilidad y culpabilidad, es otra cuestión, aunque conexionada con ésta-. En definitiva más sufrimientos personales y familiares y sociales y colectivos, con consecuencias, incluso para el Estado, la Cultura, la Civilización, el presente y el futuro. ¿Está en juego la pervivencia de Europa, tal y como la entendemos…? 

Aquí, nos planteamos de la moralidad e inmoralidad de los actos psicológicos morales. Tampoco planteamos la eficiencia instrumental de dichos actos, lo que contestarían los saberes conceptuales, Una cosa es una operación quirúrgica mal hecha, y otra, la correcta moralidad de ese acto y, la responsabilidad moral de quién la ha hecho… 

Primero, ¿pero esta anarquía y anomia moral y ética, que estamos atravesando, y cada vez va aumentando más, que acarrea enormes sufrimientos, personales, familiares, sociales, ambientales, etc., es una realidad que está sucediendo por la evolución de los tiempos…? 

Segundo, ¿o, acaso está organizada y gestionada y dirigida e incentivada por grupos de poder e ideológicos, que quieren que los hombres dejen de tener una moral más correcta, -y, con una moral más correcta, por tanto sufran menos, y psicológicamente sean más estables, por diversas razones y fines y funciones…-? 

Tercero, ¿incluso pueden existir grupos, que desde planteamientos trascendentes y trascendentales y metafísicos, hay grupos pequeños y reducidos, pero con suficiente poder, que desean, que cuántas más personas sufran y se angustien y se creen traumas, más personas se perderán eternamente, irán al infierno, con el lenguaje teológico de siglos, no se salven eternamente…? 

¡Ya, le dije, al principio, que es un tronco con preguntas difíciles y esenciales, y solo se ha rozado la piel del árbol o piedra…!  

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