Son muchos los que a esta hora se han ladeado de tan majestuosa profesión alrededor de la medicina. Aquellos que durante la pandemia, todos los días a las 20,00 horas, salíamos a nuestros balcones a agradecerles con muchas palmas lo que hacían por todos nosotros. Ahora, se despidieron de sus compañeros de viaje para hacer de todo un poco. Ha sido la solución de muchos profesionales de la salud que han dejado el trabajo para retomar las riendas de su vida y dejar atrás el agobio y el estrés. También, han dejado a cientos, miles de pacientes, pero no nos olvidemos que, también les han dado la espalda a muchos de ellos desde los organismos oficiales. Si echamos un vistazo a los EE.UU, casi la mitad de los profesionales de la salud ya no se imagina trabajando en este sector al menos 3 años.
En América, casi 50 millones de trabajadores dimitieron en 2021 pero lo peor no es los que se marcharon, sino el que quienes están pensando en seguir la misma senda. A tenor de los abandonos masivos del puesto laboral en otros países, casi para el 70% la causa ha sido el salario insuficiente y que echaban en falta las oportunidades de promoción. Otros tantos, afirmaron estar hartos de las faltas de respeto en el trabajo. ¿Se marchan nuestros médicos? Están exhaustos, agotados, quemados, cansancios psicológicos y, si añadimos cada vez más pacientes a sus espaldas, los propios y los del compañero que se ha ido, todo conspira para empujarles a médicos y enfermeros a pasarse por la dirección y presentar sus dimisiones.
Los británicos, ante estas cuestiones, han afirmado que existen demasiadas cosas que hacer y no disponen de tiempo suficiente con los pacientes. Se suponía que la tecnología iba a ser nuestra salvación, pero han empeorado las cosas. Nadie ha implicado a los doctores en el diseño del sistema de telemedicina y su última innovación ha consistido en aplicar la estrategia digital, pero no decía nada sobre los pacientes o los usuarios de los servicios.
En España nos enfrentamos a un panorama parecido. El salario de estos médicos permanece congelado desde 2006, y que desde 2009 hasta la actualidad han perdido hasta un 35% del poder adquisitivo. ¿Cuál es la solución? El Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos solo en 2021, 2504 doctores solicitaron la certificación de idoneidad para irse a trabajar a otros países. ¿Destino? Francia, Reino Unido, Irlanda, Suiza y Emiratos Árabes. Importa la remuneración, sí, pero también que existen horarios más normales y estabilidad laboral. Las típicas guardias de 24 horas que se hacen en España fuera no existen, aseguraba un joven médico español en Alemania. Poseen guardias más razonables, con sueldos iniciales de 5000 euros, y con la posibilidad de contar con una plaza fija en un año a lo sumo, merece la pena irse allí a ejercer.
Ganan en bienestar los médicos que se marchan; ganan en atención de salud las poblaciones en que aquellos se asientan, y en España, donde el déficit de facultativos seguirá creciendo en los próximos 5 años hasta llegar a 9000, los pacientes "ganan…en días y más días de espera para una consulta o una intervención.
Estamos ante una salida que, como se comprueba, deja tras de sí problemas serios. ¿Qué se van las enfermeras? Se resiente la seguridad del paciente y desciende la calidad de sus cuidados, toda vez que se sobrecarga de trabajo a los que no se han marchado. ¿Qué renuncian las de la guardería? Los padres tienen que pagar más a la cuidadora que raramente encuentren disponible, con lo que se afecta la economía familiar. A no pocos, esto los disuade de tener un segundo o tercer hijo, con lo que los índices demográficos van a menos.
Es, en definitiva, una cadena. Y ahora, en la oleada de las renuncias, ya se empiezan a echar en falta los eslabones más olvidados.
MARIANO GALIÁN TUDELA
