Clamoroso es el grito de quienes desean una sociedad más justa, honesta y transparente en la que la democracia se ejerza de manera libre y sin injerencias ilegítimas. Este es el sueño de una gran mayoría de españoles. En este contexto, el sistema electoral en España ha sido perversamente manipulado por los representantes de los partidos políticos, algo que ha sido denunciado por muchos ciudadanos.
A pesar de todo, las elecciones son una de las herramientas más importantes que tiene el ciudadano en la democracia. La sociedad espera que los procesos electorales sean libres y justos para que los ciudadanos puedan elegir a sus representantes de manera libre y sin presiones externas; cosa que dista mucho de la cruda realidad. Sin embargo, en España, el sistema electoral ha sido manipulado de manera perversa por los propios representantes de los partidos políticos, lo que ha llevado a una grave crisis de confianza en el proceso electoral.
En cualquier proceso electoral, el reparto de los votos por los partidos es uno de los aspectos más preocupantes en la actualidad. Tal vez sea el punto donde se produce una mayor manipulación "legalmente establecida" de las votaciones. Se cambian los votos a personas mayores, a los mas jóvenes. Se somete a presión por afinidad, por temas familiares, por trabajo,… a una gran parte de la gente a quien se le entregan los votos. Amén del derroche económico que supone este reparto de votos por los partidos, brutalmente antiecológico si queremos llevarlo un paso mas allá, por la ingente cantidad de papel que se tira directamente a la basura. La ciudadanía española ha denunciado en reiteradas ocasiones esta manipulación y engaño que se ejerce en el reparto de los votos por los partidos políticos, denuncia de la que todo el mundo hace oídos sordos y ahí se repite elección tras elección.
Además, los propios representantes de los partidos políticos se han aprovechado de su posición para interferir en el proceso electoral, incluso en los colegios electorales. ¿Que ciudadano a quien le ha tocado ser miembro de una mesa electoral no ha tenido problemas o algún rifirrafe con algún interventor o apoderado de algún que otro partido político a la hora de la constitución de la mesa y/o colocación de las papeletas en las cabinas?. En este sentido, es crucial que todos los representantes de los partidos políticos estén fuera de los colegios electorales para evitar cualquier tipo de interferencia en el proceso electoral. Evidentemente que en este proceso electoral, la figura del observador electoral es crucial para garantizar la transparencia y la equidad en el proceso, pero sin acceso al material electoral, ni a injerencia alguna en el proceso de constitución de las mesas electorales y su puesta en marcha.
Otro de los aspectos más preocupantes en el sistema electoral en España es la falta de proporcionalidad en la representación de los partidos políticos. Aquí los grandes partidos se han cubierto muy bien las espaldas estableciendo ciertos controles en la Ley Electoral para limitar el acceso de pequeños o nuevos partidos, interfiriendo así en el derecho a la pluralidad política, mediante el establecimiento de porcentajes mínimos para poder acceder al ya injusto reparto de escaños que ocasiona el uso de la llamada Ley D'Hondt.
Elección tras elección se producen incidencias en los colegios electorales que o bien no son atendidas como se debiera o se obvian sin establecer responsabilidad alguna a nadie. No se puede permitir por mas tiempo que se produzcan incidencias tan graves como la no colocación de papeletas de algún partido, estando estas en el colegio electoral. No se han agotado, no se las ha llevado nadie, simplemente el hecho enormemente grave de no haberlas colocado. ¿Cómo se resarce a un partido de esto o a los ciudadanos que las hubiesen cogido para votar?. Las juntas electorales no hacen nada.
La ciudadanía española está pidiendo cambios en el sistema electoral para asegurar que el proceso sea justo y transparente. En este sentido, se deben tomar medidas para garantizar la representatividad de los partidos políticos y la transparencia en el proceso electoral.
En definitiva, el sistema electoral en España necesita una reforma urgente para garantizar la integridad del proceso y la legitimidad del resultado electoral. Los ciudadanos tienen derecho a una democracia libre y justa, y es necesario que se tomen medidas para proteger y fortalecer nuestros valores democráticos. Sería importante que las autoridades pertinentes no cierren los ojos antes estos hechos, se den cuenta de la gravedad de la situación y tomen medidas en consecuencia para garantizar la transparencia y la equidad en el proceso electoral.
Francisco Miguel Muñoz Garre
Presidente de Murcia Libre
