El partido político VALORES, humanista cristiano y, perteneciente al grupo europeo de partidos cristianos ECPP (European Christian Political Party), tras el fallecimiento del Santo Padre Francisco, deseamos una vez más llevar a cabo uno de los grandes legados que nos ha dejado, en este caso, el de soñar con una Europa rejuvenecida y solidaria.
No hemos olvidado sus intervenciones de finales de 2014 ante el Parlamento Europeo y el Consejo de Europa donde nos demostró su capacidad de rejuvenecer con nuevos ideales a un continente ciertamente cansado, como en diversas ocasiones intentó ya Benedicto XVI. No hemos de olvidar tampoco que el Santo Padre recibiría el premio Carlomagno, concedido a quienes destacaban por su europeísmo.
En Valores sabemos que la creatividad, el ingenio, la capacidad de levantarnos y salir de los propios límites pertenecen de lleno al alma de Europa. Tenemos claro que, en el siglo XX, Europa ha dado testimonio a la humanidad de que un nuevo comienzo era posible y, después de años de trágicos enfrentamientos, que culminaron en la guerra más terrible que se recuerda, las cenizas de los escombros no pudieron extinguir la esperanza y la búsqueda del más cercano, donde nuestros padres fundadores, sus corazones, ardían en tal proyecto europeo.
El Papa Francisco clamaría en este Parlamento ¿Qué te ha sucedido Europa humanista, defensora de los derechos humanos, de la democracia y de la libertad? ¿Qué te ha pasado Europa, tierra de poetas, filósofos, artistas, músicos y escritores? ¿Qué te ha ocurrido Europa, madre de pueblos y naciones, madre de grandes hombres y mujeres que fueron capaces de defender y dar la vida por la dignidad de sus hermanos?
Sabemos que el Papa Francisco tenía como faro, al igual que nosotros, a los padres fundadores, mensajeros de la paz y profetas del futuro, los cuales, a fecha de hoy no han sido superados. Nos siguen inspirando, hoy más que nunca, a construir puentes y derribar muros. Tal transfusión de memoria nos permiten inhalar el pasado para afrontar con valentía el complejo cuadro multipolar de nuestros días, aceptando con determinación el reto de "actualizar" la idea de Europa. Una Europa capaz de dar a luz un nuevo humanismo basado en tres capacidades: integrar, comunicar y generar.
Las palabras del Papa Francisco, en su tercer día de haber fallecido, no se nos han olvidado cuando nos ha legado esa gran apertura mental: " Hemos de pasar de una economía líquida, que tiende a favorecer la corrupción como medio para obtener beneficios, a una economía social que garantice el acceso a la tierra y al techo como ámbito donde las personas y las comunidades puedan poner en juego -muchas dimensiones de la vida: creatividad, proyección de futuro, desarrollo de capacidades, ejercicio de valores y comunicación con los demás-"
Claramente, soñar con una Europa joven, sin plagas ideológicas, capaz todavía de ser madre, donde los jóvenes respiren el aire limpio de la honestidad, amar nuestras bellezas culturales, centradas sobre todo en los rostros de las personas más que en los números o en el nacimiento de hijos más que en el aumento de bienes "ya es". Si a ello le sumamos políticas familiares eficaces, protección de los derechos de nuestra ciudadanía, sin olvidar los deberes para con todos o…que no se pueda decir que su compromiso por los Derechos Humanos ha sido una auténtica utopía, sin duda, tales legados han sido "unos fuera de serie".
Gracias Santo Padre y no nos olvide desde el Paraíso de los justos.
Descanse en Paz y protéjanos.
Coordinación Nacional Europea
Partido Valores
