La Consejería de Agricultura y Agua iniciará mañana lunes la campaña de lucha contra la mosca de la fruta en los cultivos de variedades tempranas de uva de mesa. Para el resto de variedades la campaña comenzará a mediados de junio.

Según el director general de Modernización de Explotaciones y Capacitación Agraria, Ángel García Lidón, la mosca de la fruta “es una plaga que afecta a los frutos inutilizándolos para su consumo y su presencia es motivo de rechazo en partidas que se exportan a terceros países”.

La uva de mesa en la Región se cultiva en dos grandes áreas de producción: el Valle del Guadalentín, con unas 2.600 hectáreas, y la Vega Alta del río Segura, con unas 2.000 hectáreas. La producción de fruta está en torno a 124.700 Tm de las que unas 66.500 Tm son destinadas a la exportación.

La campaña tiene por objeto combatir la citada plaga mediante la captura de adultos en mosqueros cebados con atrayentes alimenticios, que serán colocados en huertos y parrales. El lunes se repartirán a los agricultores los cebos e insecticidas para activar y colocar en campo, en los mosqueros correspondientes. En una primera etapa se distribuirá el material para las variedades de uvas más tempranas (Superior, Sugraone, Prime, Flame, entre otras). Dicho material tiene 120 días de duración, por lo que, para aprovechar al máximo su rendimiento, según el director general, “debe instalarse en campo de forma inmediata, en el caso de aquellas variedades de uvas tempranas que se vayan a recolectar hasta finales de agosto”.

Para variedades tardías, cuya recolección se realizará entre septiembre y noviembre, la colocación de las trampas deberá hacerse a finales de junio o primeros de julio, en cualquier caso, precisa García Lidón, “unos tres meses y medio antes de la recolección, con el fin de eliminar de las parcelas lo antes posible, el mayor número de adultos de mosca de la fruta y reducir así el daño en las uvas”.

El responsable autonómico advierte a los agricultores que los cebos y el insecticida que se entregarán “no precisan de ninguna manipulación. Basta con instalarlos dentro de los mosqueros, ya que si se abren, rompen o cortan, pierden su efecto en pocos días y su eficacia se ve mermada”. En este sentido, García Lidón resalta la importancia de “utilizar correctamente los instrumentos que la Consejería pone a disposición de los agricultores”, por lo que considera conveniente que estos “consulten a los técnicos del Servicio de Sanidad Vegetal cualquier duda sobre la colocación de las trampas”.

Retirada del material

Los agricultores que se incorporan por primera vez a esta campaña deberán pasar previamente por la Oficina Comarcal Agraria de su zona a rellenar la correspondiente solicitud.

La retirada de cebos e insecticida se hará en los almacenes municipales de Alhama de Murcia (para los agricultores de Librilla, Alhama, Mazarrón y Fuente Álamo), Totana (para los agricultores de Aledo y Totana), el Centro de Desarrollo local de Puerto Lumbreras (para los agricultores de Lorca y Puerto Lumbreras), la Finca Experimental La Pilica (para los agricultores de Águilas) y la Oficina Comarcal Agraria de Cieza (para los agricultores de La Vega Alta del Río Segura).