Murcia, 29 jul (EFE).- La cifra de homicidios cometidos en la Región de Murcia ascendió a 22 en 2007, casi el doble de los registrados en 2006, aunque este aumento no responde a ninguna pauta, tendencia o causa justificada, según el director del Instituto de Medicina Legal de la Región, Emilio Pérez Pujol.

En la presentación de la memoria de la actividad de esa institución en 2007 se recordaron las cifras de homicidios de años anteriores, de la que no pueden extraerse conclusiones, pues si en 2003 hubo 16, en 2004 fueron 12; en 2005, 24, el doble; en 2006, 12, la mitad, y en 2007, 22, casi el doble, la mitad por arma blanca.

Sin embargo, se observa una clara tendencia a la baja desde 2004 en el caso de los fallecimientos violentos en accidente de tráfico, pues tras los altibajos registrados entre 1999, con 193 muertos; 2000, con 208; 2001, con 230; 2002, con 185, y 2003, con 209, de los 212 de 2004 se va reduciendo la cifra paulatinamente hasta los 163 de 2007, pasando por los 198 de 2005 y los 174 de 2006.

Según Pérez Pujol, una de las causas de este descenso hay que atribuirla a la mejora de la red de carreteras, no así a la menor ingesta de alcohol, "mucho menos responsable de los accidentes de lo que se dice", puesto que desde hace años es mayor la proporción de fallecidos que no habían bebido, seis de cada diez, que la de la que lo habían hecho, el 42 por ciento.

Llama la atención en este capítulo el número de muertes por accidentes de tractor, diez; el incremento registrado entre los motociclistas, que pasan del 25 por ciento de 2006 al 32 por ciento de 2007 respecto al total de fallecidos, y el descenso entre los conductores y ocupantes de turismos, que baja del 50 por ciento de 2006 al 41 por ciento de 2007, también con relación al global.

Si 163 de las 317 muertes accidentales de 2007 lo fueron por siniestros de tráfico, los laborales acabaron con la vida de 16 personas; las caídas, con la de 36, y las drogas, con la de 37.

En total, los 15 trabajadores del instituto analizaron en 2007 los cadáveres de 785 personas (ocho de cada diez, varones), cifra similar a la que se viene registrando desde 2004, el 57 por ciento de las cuales falleció de forma violenta.

De las muertes violentas, 317 (un 71 por ciento) lo fueron en accidente, frente a las 296 de 2006; 22 (un 6 por ciento), por homicidio, y el resto, 103 (un 23 por ciento), por los 123 de 2006, y la mitad de ellos se ahorcaron.

Respecto a los suicidios, Pérez Pujol comentó que este año 2008 ya se han producido tres casos debidos a la crisis económica, que dejaron una carta explicando los motivos que les llevaban a quitarse la vida, uno de ellos el del parricida de Yecla, que definió como "un momento de desesperación, una especie de crimen por amor".

Cuatro de cada diez de los 17.551 lesionados reconocidos en el instituto lo fueron por agresiones (7.541, de las que 130 fueron sexuales), y el resto, 9.594, por accidentes de tráfico, además de un número residual, 64, de personas mordidas por perros.

Los médicos forenses realizaron 1.828 valoraciones, casi la mitad en Murcia, debidas a agresiones machistas violentas.

"Tenemos los medios suficientes para el trabajo que hacemos, y no hay trabajo suficiente para montar un laboratorio de criminalística, otro de análisis de ADN y un instituto toxicológico", concluyó Pérez Pujol.

No obstante, estas tres instalaciones están contempladas en los planes del ministerio de Justicia para la construcción de una nueva sede del Instituto de Medicina Legal, que su director quiere ver en la segunda fase de la Ciudad de la Justicia, en Murcia capital. EFE