Los datos del último estudio realizado por la Consejería de Sanidad y Consumo en el año 2007 para valorar la calidad de vida relacionada con la salud de la población de la Región de Murcia indican que el 68,7 por ciento de la murcianos tienen buena calidad de vida en relación con el Índice de Salud Físico y el 66 por ciento respecto al Índice de Salud Mental.

Para llevar a cabo este trabajo Sanidad realizó una encuesta de salud a los ciudadanos de la Región mayores de 18 años Región, tanto sanos como enfermos. En total, se entrevistó a 3.381 personas, de las cuales el 50,5 por ciento eran hombres con una media de edad de 43,6 años y el resto mujeres con una media de 46 años, de los encuestados el 91,6 por ciento había nacido en España. El cuestionario consta de 30 preguntas agrupadas en cinco bloques: problemas de salud, utilización de servicios sanitarios, salud y bienestar, hábitos de vida y datos demográficos. En general, estas encuestas permiten valorar de forma integral los aspectos relacionados con la salud.

El resultado señala que más de la mitad de las mujeres preguntadas afirmó no haber fumado nunca (57,5 por ciento) frente al 34 por ciento en caso de los hombres. Algo menos de la mitad de la población (45,5 por ciento) manifestó consumir alcohol, aunque no diariamente. Sólo un 6,8 por ciento realizaba actividad física moderada-alta en su ámbito laboral (caminar o realizar grandes esfuerzos), mientras que el 55,6 por ciento de las mujeres y el 46,2 de los hombres declaró no realizar actividad física en su tiempo de ocio.

El 61 por ciento de la población dijo padecer al menos una patología crónica y en un 10,4 por ciento, el número de patologías concomitantes eran 4 ó más. Las dolencias más frecuentes son artrosis y problemas reumáticos, alergia, hipertensión arterial y depresión. Además, estas cuatro patologías son más frecuentes en la mujer que en el hombre.

Visitas al médico

Más de la mitad de los encuestados (54,5 por ciento) realizó su última visita médica, tanto de atención primaria como especializada, entre un mes y un año antes de realizar la encuesta, siendo la especialidad más frecuentada medicina de familia, seguida por ginecología y obstetricia en mujeres y traumatología en hombres. Por lo tanto, los lugares de consulta más frecuente fueron los centros de salud y consultorios, seguidos de las consultas externas del hospital. Los motivos principales de consulta fueron para determinar un diagnóstico o bien una revisión.

El 8,3 por ciento de los ciudadanos fueron hospitalizados en el transcurso del último año y, de éstos, un 7,5 sólo lo hicieron una vez. Los motivos de hospitalización más frecuentes fueron para practicarles una intervención quirúrgica.

En líneas generales, el estudio para valorar la calidad de vida relacionada con la salud no ha detectado desigualdades de salud en función del área de salud de residencia de la población. No obstante, sí se han detectado desigualdades difícilmente evitables como son las provocadas por la edad, a mayor edad peor calidad de vida, el sexo, los hombres presentan mejor calidad que las mujeres, la carga de enfermedad, a mayor número de patologías concomitantes peor calidad de vida relacionada con la salud, o el padecimiento de determinadas condiciones médicas crónicas, como la artrosis y los problemas reumáticos, las enfermedades del corazón, los tumores malignos, los problemas respiratorios crónicos y la depresión, que son de las patologías que más afectan a la calidad relacionada con la salud de forma general en la población. Otras desigualdades de salud detectadas están relacionadas con la realización de ejercicio físico, pues los que lo practican presentan mejor calidad de vida.

Como señala el director general de Planificación, Ordenación Sanitaria y Farmacéutica e Investigación, José Antonio García Córdoba, “los resultados de este trabajo permiten identificar y monitorizar las desigualdades en salud y son de gran utilidad en la elaboración de programas sanitarios y estrategias de salud, ya que facilita la identificación de poblaciones vulnerables, además, sirven de referencia a los profesionales sanitarios de la Región a la hora de comparar la calidad de vida de determinadas patologías crónicas con la de la población general, siendo de gran utilidad para establecer objetivos terapéuticos”