El secretario de Seguridad del PP de la Región de Murcia y diputado regional, Pedro Chico, ha reclamado al secretario general de los socialistas murcianos, Pedro Saura, a que se pronuncie la imputación del senador del PSOE Manuel Hurtado y la remisión de su causa al Tribunal Supremo. El responsable del PP ha incidido en que “aún no hemos escuchado a Saura ni a ningún dirigente de los socialistas murcianos sobre el grave hecho que supone que un Juzgado de Molina de Segura haya remitido una causa por prevaricación y falsedad contra el senador del PSOE Manuel Hurtado al Tribunal Supremo”.
“A pesar de que la juez ha apreciado indicios de delito contra el senador socialista por su gestión como alcalde de Ceutí al haber suscrito la firma de un contrato de un centro deportivo después de que éste fuera edificado, Saura aún no ha exigido ningún tipo de responsabilidad”, ha afirmado Chico.
Por ello, el diputado del PP ha criticado la “doble vara de medir del PSOE cuando hay imputados de uno u otro partido”, puesto que “mientras exige dimisiones y responsabilidades políticas al PP, mantiene en su cargo de senador a una persona en la que una juez ha apreciado indicios de delito”.
“Cuando hay imputados del PSOE, se pasa de puntillas, se trata de silenciar y no se exigen responsabilidades. Al parecer, a Hurtado Saura no le reclama el acta de senador ni se le pide la baja del partido”, ha criticado el secretario del PP.
“Si exigen a los miembros del PP que dimitan, lo mínimo que deben hacen con los del PSOE es plantear su dimisión. Que dimita y que no se parapete en la protección que ofrece el Congreso y el Senado a los aforados. Si queremos transparencia y claridad, que renuncie a su acta de senador y dé la cara para poder mostrar su inocencia”. En este punto, ha recalcado que “en el PP sí creemos en la presunción de inocencia, a diferencia del PSOE, que parece que más bien cree en la presunción de culpabilidad”.
Por otro lado ha apuntado que, como ha sido reflejado por los medios de comunicación, hay que recordar que Hurtado inauguró CeutImagina el 24 de noviembre de 2004, cuando la obra ni siquiera estaba adjudicada. Además, una auditoría en el Ayuntamiento de Ceutí ha revelado que CeutImagina se adjudicó a dedo a una empresa sin cumplir los principios de publicidad y concurrencia que exige la ley, de tal forma que ninguna otra empresa pudo optar a esta obra, que supuso siete millones de euros.
