La agricultura de la Región de Murcia está atravesando uno de los momentos más críticos de su historia, lo que ha hecho que el pesimismo se esté extendiendo entre los profesionales que conforman el sector y que vislumbran un futuro incierto. Es por ello que, para “revitalizar el panorama agrícola” se hace necesario “contar con la ayuda del Gobierno central, que debe de ponerse las pilas y trabajar para sacar adelante a un sector estratégico para la economía española”, según subraya el secretario general de ASAJA Murcia, Alfonso Gálvez Caravaca.

La crisis que viene padeciendo la agricultura murciana se ha visto “agravada” durante los primeros meses del año. Factores como “la caída en picado de los precios en origen, que ha afectado a las frutas y hortalizas de la temporada estival; la excesiva fiscalidad a la que tienen que hacer frente agricultores y ganaderos; el abuso de la gran distribución; así como por la existencia de una incertidumbre económica global” han venido a complicar aún más la maltrecha situación que vive el sector, que atraviesa uno de los peores momentos de su historia, según apunta el titular de ASAJA Murcia, Alfonso Gálvez Caravaca.

A esto hay que sumar, la competencia de terceros países productores, que ha sido otra de las cuestiones que ha contribuido a la “pérdida de rentabilidad” que está afectando a los productores hortofrutícolas de la Región, explica Gálvez Caravaca.

De ahí que, en palabras del secretario general de ASAJA Murcia, “a día de hoy el agricultor tiene que seguir haciendo frente al incremento de los costes de producción, a pesar de que la disminución de los precios es una tendencia sostenida durante años, salvo para algunos tipos de cultivos. Y parece que esta situación no va a cambiar a corto plazo”.

Desde ASAJA Murcia reclaman al Gobierno central que tome, de forma urgente, cartas en el asunto. Gálvez Caravaca apunta que el Ejecutivo que preside Rodríguez Zapatero “debería empezar a favorecer el aumento progresivo de ayudas agrarias, que cubran, de alguna forma, la necesidad inmediata de liquidez que sufre el agricultor; ya que estas circunstancias están llevando a un buen número de productores a plantearse el futuro de unas explotaciones agrarias que son un pozo sin fondo”.

Otra de las soluciones que pondría freno a esta situación pasa por invertir en tecnología, investigación y formación como una garantía para conseguir la máxima eficacia de los cultivos al menor coste posible. De esta manera, a criterio de Gálvez Caravaca, “destinar fondos para la investigación a la hora de aplicar nuevas tecnologías agrícolas y de comercialización a los procesos productivos incidiría positivamente en el ahorro de costes y la flexibilidad productiva”.

Para ASAJA Murcia “lo más importante es reflotar un sector que debe salir de la crisis gracias al apoyo de las autoridades autonómicas y estatales, de la misma forma que se está haciendo un esfuerzo económico con otros sector como el automovilístico, que también se ha visto duramente castigado por la crisis económica”.