Un cambio de regulación en materia de energías renovables conllevaría pérdida de empleo y destrucción de empresas

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CROEM ha realizado estudio sobre la situación de las ENERGIAS RENOVABLES en la Región de Murcia y el impacto que podría producirse por el anunciado cambio regulatorio, especialmente en el ámbito de la Región de Murcia. En dicho estudio se manifiesta la preocupación por la trascendencia de su importancia y la oportunidad con la que se puede producir caso de cumplirse los anuncios del Ministerio competente.

1ª.- En primera instancia es de advertir sobre el fomento que desde la Administración Estatal, también secundada por la Regional, se favoreció las energías renovables, estímulo que supuso llevar a efecto las inversiones procedentes, tanto de la eólica como de la solar, principalmente esta última. La expresa convocatoria propició que agrupaciones y cooperativas agrarias, es decir, pequeños inversores, se sumaran a distintos proyectos cuya rentabilidad aparecía garantizada por las compensaciones reconocidas. Incluso acudiendo a operaciones de crédito para hacer frente a sus obligaciones. Cualquier cambio regulatorio que revise a la baja las previsiones existentes representa expreso atentado a la seguridad jurídica y ocasionaría un perjuicio irreparable a quienes comprometieron recursos propios, situación que no es posible ignorar y que obliga a ponderar las decisiones finales.

2ª.- Además de la situación de personas y colectivos directamente afectados, las repercusiones económicas de carácter general resultan igualmente evidentes: de una parte, la que se deriva de la eventual pérdida de puestos de trabajo y valor añadido. De otra, las implicaciones hacia la sostenibilidad energética y su contribución al abultado déficit por cuenta corriente de la economía española.

Un reciente estudio del Observatorio de la Sostenibilidad en España estima en 2.512 los empleos de las energías renovables en la Región de Murcia (en torno al 10% del total nacional), si bien otras asociaciones señalan que, al margen de los empleos directos, hay 3.800 empresas y 15.000 personas con intereses en instalaciones de energía solar fotovoltaica.

3ª.- Ante esta situación sobrevenida y causada por decisiones políticas, CROEM manifiesta respaldo pleno a las acciones de protesta y reivindicativas que día a día se suceden acreditando el daño que se está causando y el riesgo de perder inversiones programadas.

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