El número de parados aumentó en 1.696 personas durante el pasado mes de septiembre en la Región de Murcia, para dejar la cifra total de desempleados en 129.231, según datos del Ministerio de Trabajo e Inmigración.
Este crecimiento (1,33%), el segundo consecutivo en la Región, se sitúa por encima de la media nacional (1,21%), si bien resulta significativamente menor que el alcanzado en el mismo periodo de los dos últimos años.
En términos interanuales, es decir, en comparación con septiembre de 2009, se registran 13.963 parados más, un 12,1%, tasa también mayor a su correlativa nacional (8,3%).
El sector Servicios explicó por completo la subida del paro de septiembre, con 2.336 parados más que en agosto (3,5%). La finalización de la temporada estival y la debilidad del consumo explican una situación que se ha reproducido en los últimos tres años.
En cambio, los restantes sectores presentaron moderadas reducciones del paro que apenas compensaron la caída de las ramas terciarias. Construcción experimentó la evolución más favorable, 855 parados menos (-3%), en tanto que Industria (-212) y Agricultura (-142) presentaron descensos moderados.
El colectivo Sin Empleo Anterior cerró septiembre con 569 personas más en situación de desempleo y una subida superior al 40% en los últimos doce meses. Una muestra de que las personas que se incorporan al mercado laboral encuentran de momento grandes dificultades.
Atendiendo al sexo, la subida del paro afectó en mayor medida a las mujeres. De hecho, en comparación con agosto hay menos hombres en situación de desempleo (326), en cambio, hay 2.022 nuevas paradas. La bajada del paro en construcción, sector que emplea mayoritariamente a hombres, explica este comportamiento.
Los jóvenes absorbieron la subida del paro de septiembre. En concreto, el número de parados menores de 25 años se ha elevado en 1.532, y el de mayores en apenas 164. El término del periodo estival ha supuesto la finalización de numerosos empleos propios de esta época del año y ocupados por los más jóvenes. En cambio, en el cómputo de los últimos doce meses el comportamiento es el opuesto, con mayor incidencia del incremento del paro entre los mayores de 25 años.
Por otra parte, la reducción del paro entre el colectivo inmigrante (-575) mejora ligeramente su situación, aunque aún se contabilizan 23.336 desempleados extranjeros, 3.233 más que hace un año.
Tras la reducción de actividad de agosto, durante septiembre se reactivó la contracción, con la formalización de 45.762 nuevos contratos - 10.553 más respecto al mes anterior-, de los que el 8,4% fueron indefinidos.
Tal y como ha venido sucediendo en el mes de septiembre de años anteriores, el número de afiliados a la Seguridad Social se ha reducido considerablemente (6.861 afiliados menos). De este modo, las caídas acaecidas en agosto y septiembre han sido suficientes para compensar la leve recuperación registrada en los primeros meses del año. En los últimos doce meses se ha destruido empleo al ritmo del 2%.
En definitiva, el comportamiento del mercado laboral sigue reflejando la debilidad de la actividad económica, pero también las rigideces de un modelo laboral que lastra las posibilidades de recuperación de empleo.
Por tanto, desde los agentes sociales debe contribuirse a aportar las reflexiones convenientes –siempre desde las posiciones de diálogo que han caracterizado la conciliación social- para perfeccionar y reforzar las medidas adoptadas hasta el momento por los poderes públicos, que suponen en cualquier caso un punto de partida –mejorable- para conseguir la reforma laboral que necesita la economía española.
