Los hospitales de la Región notificaron durante el pasado verano ocho casos por golpes de calor y en los centros de Atención Primaria se atendieron 39 episodios

La Consejería de Sanidad y Política Social, a través de la Dirección General de Salud Pública y Drogodependencias, activó el pasado domingo, 1 de junio de 2014, el Plan de Acciones Preventivas contra los Efectos del Exceso de Temperaturas sobre la Salud 2014, que se prolongará hasta el próximo 15 de septiembre, como es habitual, para focalizar su atención en personas mayores, niños, trabajadores y deportistas al aire libre.

El director general de Salud Pública y Drogodependencias, Francisco García, indicó que "la finalidad de esta iniciativa, desarrollada desde el año 2004 por la ola de calor que en 2003 afectó a Europa, es prevenir posibles situaciones derivadas de la exposición a altas temperaturas".

De este modo, la Comunidad se une al Plan Nacional de Acciones Preventivas contra los Efectos del Exceso de Temperaturas sobre la Salud, cuya finalidad es informar a la sociedad de los riesgos que suponen las altas temperaturas y monitorizar su impacto sobre la salud.

En la Región, será el Servicio de Sanidad Ambiental de la Dirección General de Salud Pública y Drogodependencias el responsable de elaborar el Índice Diario de Extremos Térmicos (IDET) tomando como base las temperaturas umbrales máxima y mínima establecidas para la Región (38° C y 22° C).

El IDET, como todos los años, se publica en la web http://www.murciasalud.es/ y se envía de lunes a viernes por correo electrónico a más de 80 direcciones, entre las que se encuentran centros de salud, hospitales, ayuntamientos, Cruz Roja, Protección Civil y medios de comunicación, entre otros organismos.

Un golpe de calor, a diferencia de otras patologías relacionadas con el calor como pueden ser los desmayos, es una emergencia médica y causa tratable de fracaso multiorgánico caracterizado por un incremento de la temperatura corporal central por encima de 40 grados centígrados y alteraciones del sistema nervioso central donde predomina la encefalopatía.

Durante el pasado verano, los profesionales de los centros hospitalarios de la Región notificaron ocho golpes de calor y ningún fallecido por esta causa. Asimismo, en los Centros de Atención Primaria se atendieron 124 episodios por golpe de calor o patologías relacionadas con el calor de los que el 31 por ciento, 39, fueron clasificados como golpe de calor y el resto como efectos adversos de calor, desmayos por calor, insolación o calambres por calor.

Los hospitales del Servicio Murciano de Salud notificaron en el verano de 2012 un total de 14 golpes de calor, con un fallecido. En los Centros de Atención Primaria se atendieron 162 episodios por golpe de calor o patologías relacionadas episodios por golpe de calor o patologías relacionadas con el calor de los que el 46 por ciento fueron catalogados como golpe de calor y el 54 por ciento como efectos adversos de calor, desmayos por calor, insolación o calambres por calor.

Prevención y recomendaciones

El director general de Salud Pública y Drogodependencias, Francisco García, advirtió a los ciudadanos de que los golpes de calor pueden llegar a provocar la muerte e insistió en la "importancia de adoptar conductas responsables para evitarlos". En este sentido, subrayó el efecto perjudicial del calor en personas dependientes o que viven solas.

Sanidad recomienda a la población que tome algunas precauciones para proteger su salud, como beber mucha agua o líquidos sin esperar a tener sed y evitar las bebidas alcohólicas, café, té o cola y las muy azucaradas. Asimismo, en los días de intenso calor hay que permanecer en lugares frescos, a la sombra., tomar una ducha o un baño fresco y bajar las persianas para evitar que el sol entre directamente.

Asimismo, es positivo hacer comidas ligeras a base de ensaladas, frutas, verduras, gazpachos o zumos que ayuden a reponer las sales perdidas por el sudor, así como evitar las actividades en el exterior en las horas más calurosas, sobre todo si las actividades son intensas. Si hay que permanecer en el exterior, procurar estar a la sombra, usar ropa ligera y de color claro, protegerse del sol, usar sombrero y gafas de sol, además de utilizar un calzado fresco, cómodo y que transpire.