(- 0,2%), se puede considerar como positiva. El mantenimiento del acumulado en
- 1,4%, desde el punto de vista de los salarios, no puede considerarse como negativo, ya que esta situación permite no perder más poder adquisitivo en la Negociación Colectiva.
CCOO Región de Murcia considera que desde el punto de vista de la negociación colectiva y con carácter general, se considera positivo que el IPC en el último año se haya situado en el -0,3%. Además del hecho de que la variación mensual del IPC de octubre (0,1%) haya situado el acumulado en el -1,4% en la Región de Murcia. Es significativo que la variación anual se haya reducido en 0,6 décimas, de agosto (-0,9) a septiembre (-0,3%).
Estos datos son similares a los datos nacionales (0,2%) en septiembre, con un acumulado 5 décimas inferior al de la región de Murcia (0,9%) y el anual (-0,2%) también por debajo 1 décima del anual Regional (-0,3%).
CCOO considera que el Gobierno del Estado y el de la Región, deben controlar los precios, ya que la ausencia de control de estos, puede ser tan negativa en la inflación como en la deflación, si se llegase a producir; de hecho continuamos en números negativos, tanto en el anual (-0,3%), como en el acumulado desde enero a septiembre de 2014 (-1,4%).
La tasa del 0,1% se debe, fundamentalmente, al incremento de los precios de vestido y calzado, con un 3.5% (como consecuencia de la terminación de las rebajas y la correspondiente actualización de precios); vivienda con una subida del 1,3% (Incremento de la luz básicamente). En el sentido negativo de reducción de precios, destacan Ocio y cultura con una reducción de un -2,4%; Enseñanza -0,8%; Hoteles; Cafés y restaurantes -0,7% (Reducción de precios de hoteles fundamentalmente); y el transporte 0,2% (debido a la bajada de los carburantes).
Desde CCOO consideramos que la inestabilidad de los precios en la región (-1,4%) del acumulado, representa un problema a corto plazo para la mayoría de los comercios; la mínima demanda interna, provoca bajadas de precios no deseables para el buen funcionamiento de la economía y el consumo. Una vez más se demuestra que la política de recortes llevada a cabo por el gobierno ha provocado un empobrecimiento general de la sociedad de consumo, y por tanto una reducción de la demanda de bienes en general, provocando una difícil situación para los comercios en general.
Es urgente un cambio de la Reforma de la Negociación Colectiva, que permita por un lado la recuperación del poder adquisitivo de los trabajadores, y por otro, impida la competencia desleal entre las empresas de un mismo sector, que en la actualidad se viene produciendo como consecuencia de una Reforma Laboral llevada a cabo para beneficiar al incumplidor en materia de abono de salarios y cotizaciones.
Por último, insistir en la exigencia al Gobierno de un mayor control de los precios, de manera que no se produzcan los altibajos actuales, que en nada benefician a la economía en general.
