El Obispado de Cartagena ha recuperado hoy un farol de plata de estilo barroco robado en la Catedral en 1977, gracias a un aviso de la Universidad de Murcia y del trabajo realizado por la Guardia Civil.
El pasado 19 de noviembre, el Vicario General de la Diócesis de Cartagena y Deán Presidente del Cabildo de la Catedral, Juan Tudela, recibía una llamada de la Facultad de Historia del Arte de la Universidad de Murcia que le alertaba de la subasta en Madrid de un farol que podría ser el que fue robado en la Catedral en 1977. Tudela lo comunica en ese momento a la Guardia Civil quien a su vez lo hace al Juzgado de Guardia, número 5, quien ordena la incautación del farol que es puesto a disposición de la Dirección General de Bienes Culturales de la Consejería de Cultura de Murcia, hasta que se realice la peritación necesaria que certifique que es el que se sustrajo de la Catedral hace 38 años.
Una vez confirmado, el delegado de Gobierno en Murcia, Antonio Sánchez-Solís, ha entregado en depósito esta mañana el farol al Obispo de Cartagena, Mons. Lorca Planes, para que regrese a la Catedral mientras finaliza la investigación.
El farol, de plata y estilo barroco, es del siglo XVIII y fue un regalo que el segundo Marqués de Torre Pacheco realizó a la Catedral de Murcia. Estuvo a punto de ser subastado el pasado 24 de noviembre en Subastas Goya (Madrid), con un precio de salida de 1.500 – 2.000 euros.
La operación en la que se ha recuperado este objeto entra dentro de un plan que puso en marcha la Guardia Civil en 2012 para la defensa del patrimonio y que ha posibilitado la recuperación de muchas piezas de interés cultural y patrimonial.
La Consejera de Cultura, Noelia Arroyo, ha destacado que el éxito de esta operación se debe a la cooperación entre Universidad de Murcia, Obispado, Guardia Civil, Delegación de Gobierno y Consejería de Cultura, y ha agradecido el trabajo de los profesores de la Universidad de Murcia que dieron la alerta.
El Obispo de Cartagena ha manifestado su alegría por la recuperación de este farol y ha explicado que recuerda el día en el que fue robada de la Catedral, junto con otras piezas, entre las que se encontraba una corona de la Virgen de la Fuensanta, aprovechando las obras de restauración que se estaban realizando en la capilla de los Vélez: “fue una conmoción para todos los murcianos, no sólo por el valor artístico en sí”.
El Deán, en nombre del Cabildo Catedralicio, agradece el trabajo de todos los que han hecho posible que este farol regrese de nuevo a la Catedral: profesores de la Universidad de Murcia, autoridades judiciales, Guardia Civil, Consejería de Cultura y Delegación de Gobierno.
