Hablarán de las implicaciones en la vida diaria de la 'Convención de los derechos de las personas con discapacidad' de Naciones Unidas.
Las hermanas y hermanos son apoyos fundamentales para conseguir la inclusión social de las personas con discapacidad intelectual. Además, representan el futuro de las asociaciones de familias y su contacto más directo con su entorno, con la sociedad. Por eso, Plena inclusión Región de Murcia, la federación de estas asociaciones, celebra hoy en Murcia un encuentro donde compartirán experiencias y aprenderán sobre los derechos de las personas con discapacidad y sobre los suyos propios como familiares. Esta actividad está financiada gracias a los contribuyentes que marcan la casilla de 'Otros fines de interés social' en su declaración de la renta por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.
El tercer encuentro de hermanos se organiza a propuesta de éstos y reúne a más de 50 participantes de distintos puntos de la Región. Hoy seguirán profundizando en los derechos de las personas con discapacidad intelectual de la mano del asesor jurídico de Plena inclusión Región de Murcia. Abordarán la Convención de los derechos de las personas con discapacidad de la ONU que fue ratificada por España y entró en vigor en nuestro Ordenamiento en 2008.
Esta vez hablarán de derechos desde un punto de vista más cercano al día a día de las familias, con ejemplos de situaciones cotidianas como la participación de las personas con discapacidad en decisiones que les afectan; su derecho a tener la información como los demás, por ejemplo cuando otro familiar enferma o muere, el derecho a la intimidad, etc. .
Plena inclusión Región de Murcia es el resultado de la unión de más de 3.000 familias que trabajan en común por el bienestar de las personas con discapacidad intelectual formando 27 entidades y da empleo a 500 profesionales.
En toda España, Plena inclusión está formada por 891 entidades repartidas por el territorio español. Representa a más de 106.700 personas con discapacidad intelectual, 235.000 familiares, 24.000 profesionales y 8.000 personas voluntarias.
