El detenido con múltiples antecedentes policiales y judiciales, fue detenido portando algunos de los objetos sustraídos.

En uno de sus robos fue sorprendido por los moradores, con los que forcejeó violentamente, logrando su huída, aunque posteriormente no logró evadir la acción de la Policía Nacional.

La Policía Nacional detuvo el pasado siete de noviembre a un peligroso delincuente, especialista en el robo de domicilios cuando sus moradores duermen, accediendo a su interior mediante escalo hasta las puertas del balcón o ventanas que estuvieran abiertas.

Las investigaciones se iniciaron el pasado mes de julio, sobre las cuatro de la madrugada, cuando un individuo fue sorprendido en el interior de un domicilio sito en la calle Dalia, y ante los gritos de auxilio de la familia, salió huyendo no sin antes sustraer dinero en efectivo y otros objetos de valor.

Posteriormente, el pasado mes de agosto, sobre las tres de la madrugada, este mismo individuo se introdujo en otro domicilio, sito en la Plaza José María Artés y al verse sorprendido por los moradores, no dudó en agredir a éstos con un destornillador que portaba, provocándole unas lesiones leves y apoderándose de joyas y varios móviles.

Ya en el mes de octubre, de nuevo este delincuente se introduce en una vivienda sita en la Plaza de Molina, sobre las cuatro de la madrugada, donde también es encontrado por el morador en plena "faena", dándose a la fuga tras saltar desde el balcón al exterior apoderándose de la cartera con documentación y dinero.

Y finalmente, el pasado cinco de noviembre, de nuevo actúa este sujeto, introduciéndose en el interior de un domicilio sito en la calle Don Matías, donde nuevamente es sorprendido por los moradores con los que forcejea violentamente, y ante el temor a ser agredidos con un arma blanca que portaba, le dejaron marchar, dándose cuenta posteriormente que se había apropiado de una cartera con dinero.

Se da la circunstancia que este individuo, que había sido plenamente identificado por los investigadores, después de cada fechoría, se refugiaba en un "garito", donde gastaba todo su botín en sustancias estupefacientes, y de esta forma eludir su búsqueda por los agentes.

Finalmente, la constancia de los policías adscritos al Grupo de Robos de la Comisaría de la Policía Nacional en Cartagena, pudo averiguar el lugar donde se ocultaba, procediendo a su detención dos días después de este último delito, portando entre sus pertenencias tres carteras sustraídas en los robos denunciados.

Al detenido de 48 años de edad, le constan 58 detenciones policiales por delitos contra la propiedad.

Finalmente, se le imputaron un total de siete robos en domicilios y una vez finalizadas las diligencias fue puesto a disposición judicial que ordenó su inmediato ingreso en prisión.