El delegado del Gobierno, Antonio Sánchez Solís, ha inaugurado esta mañana una nueva edición del curso de intervención técnica en catástrofes que, con carácter anual, organiza la Delegación del Gobierno en colaboración con la Escuela Nacional de Protección Civil con el objetivo de capacitar y formar expertos en estimación y valoración de daños en viviendas y edificaciones afectadas por catástrofes.

El curso está diseñado especialmente para arquitectos técnicos/superiores e ingenieros técnicos/superiores y otros licenciados relacionados con la materia en cuestión, preferentemente aquellos que desarrollan sus funciones en las administraciones públicas y que se pudieran ver involucrados en los trabajos de estimación y valoración de daños en viviendas y edificaciones derivados de una catástrofe.

“Resulta indudable que, en situaciones de catástrofes, es de extraordinaria relevancia contar con equipos de especialistas capaces de llevar a cabo, de la manera más efectiva y diligente, la evaluación de los daños producidos, porque la tragedia pone de manifiesto la vulnerabilidad de las personas afectadas que, de forma imprevisible, ven desmoronarse su entorno y propiedades sin poder hacer nada para evitarlo”, indicó el Delegado durante la inauguración.

Tras la experiencia acumulada en los últimos años  en la Región de Murcia en relación al estudio y valoración de daños en viviendas afectadas por situaciones de catástrofe en las que procede otorgar ayudas económicas a los damnificados, es necesario valorar, cada vez más, la importancia de que estos estudios sean abordados por profesionales específicamente formados en intervención en catástrofes, considerando tanto su utilidad para caracterizar los daños estructurales y no estructurales como su capacidad para estimar el impacto económico y social y generar información útil para la toma de decisiones en situaciones de emergencia.

Los movimientos sísmicos del 11 de mayo de 2011 en Lorca, donde el 80% de los inmuebles del término municipal resultaron dañados con diverso grado de afección y de los que un 20% de ellos presentaba patologías severas a muy severas, han puesto de manifiesto, de forma evidente, la necesidad de contar con profesionales formados en el campo de la estimación de daños.

En el caso concreto de la secuencia sísmica de Lorca, la disponibilidad de un importante número de profesionales con preparación específica, que habían recibido formación previa en las diferentes ediciones de este curso contribuyó, de forma significativa, a resolver el problema planteado con éxito.

El curso tiene una duración de 25 horas y se prolongará hasta el próximo viernes 10 de marzo.