La Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, a través del Instituto Murciano de Acción Social (IMAS), destina este año 3.075.000 euros para favorecer la inserción sociolaboral de las personas en situación o riesgo de exclusión social. Al respecto, el presupuesto para programas de mejora de la empleabilidad se ha multiplicado por cuatro con respecto a 2014, y se prevé que continúe ascendiendo hasta 2021, ya que se cuenta con financiación del Fondo Social Europeo.

Las dificultades añadidas que presentan las personas en situación de exclusión social dificultan su acceso al empleo y les sitúan en situación de desventaja respecto al resto de desempleados, de forma que es necesario complementar las acciones encaminadas a la inserción laboral con actuaciones de índole social, dirigidas a promover la adquisición de competencias personales y laborales y a la superación de sus dificultades.

Así, el IMAS subvenciona desde 2007 a entidades del ámbito social para que desarrollen programas de mejora de la empleabilidad, a través de itinerarios personalizados de inserción sociolaboral, para lo cual cuentan con dos líneas de ayudas cofinanciadas por el Fondo Social Europeo: los programas de integración sociolaboral y mejora de la empleabilidad en el Marco del Programa Operativo FSE 2014-2020 de la Región de Murcia, y acciones específicas para jóvenes beneficiarios del sistema de Garantía Juvenil, que se enmarcan en el Programa Operativo de Empleo Juvenil 2014-2020 y que se pusieron en marcha a finales de 2015.

De los participantes en estas acciones, un 27 por ciento consigue la inserción laboral, mientras que en los programas para jóvenes el porcentaje de inserción es del 22 por ciento.

La consejera Violante Tomás resaltó que el IMAS ha apostado por los programas de mejora de la empleabilidad, intentando ampliar paulatinamente la cobertura de estos programas a toda la Región. Así, concretó "se ha ido incrementado el número de participantes en los programas, y se ha pasado de atender a 1.595 personas en los programas de 2014, a las 3.100 personas que se prevé que participarán en los itinerarios de inserción de 2018".

La titular de Familia explicó que "la metodología utilizada, que se centra en el acompañamiento individual a lo largo de todo el proceso de promoción personal, formación e incorporación al mercado laboral, ha permitido minimizar las barreras que presentan los participantes, multiplicando los efectos positivos, que no se limitan únicamente a la esfera laboral, sino que trascienden al ámbito personal, familiar y social del participante". Además, especificó que "en la medida que los participantes avanzan en su itinerario de inserción sociolaboral se promueve su autonomía y la utilización de los recursos normalizados de empleo y formación".