La Asamblea Feminista de Murcia, integrada por una veintena de organizaciones, asociaciones y colectivos, insta al presidente de la Comunidad Autónoma de Murcia, Fernando López Miras, a que cumpla con la legalidad vigente, reconociendo el derecho al aborto y la dignidad de las mujeres que lo ejercen, en lugar de humillarlas a través de una Ley regional en las que las califica de "fracasadas".
Consideran que la supuesta "protección" que el PP pretende imponer por Ley a las mujeres interfiere en uno de los asuntos más íntimos y personales que las personas afrontan a lo largo de sus vidas, como es la decisión de tener hijos y cuándo tenerlos. Además, contradice una ley en vigor atropellando el derecho de las mujeres a adoptar las decisiones que les corresponden, y cuestionando de forma "paternalista" su capacidad y autonomía.
En este sentido, han recordado que, tal como establece el preámbulo de la Ley Orgánica de salud sexual y reproductiva e interrupción voluntaria del embarazo "la capacidad de procreación está directamente vinculada a la dignidad de la persona y al libre desarrollo de su personalidad", además de ser "objeto de protección a través de distintos derechos fundamentales, en particular, de aquellos que garantizan la integridad física y moral y la intimidad personal y familiar".
Para las mujeres feministas de Murcia la utilización del aborto como moneda de cambio para contentar a los sectores más conservadores de su electorado no es justo con las mujeres ni con la sociedad. Han recordado que esta estrategia fue ya utilizada por el ministro Ruiz Gallardón, quién finalmente tuvo que presentar la dimisión ante el rechazo social que provocaron sus intentos de restringir este derecho.
Por ello, en lugar de "criminalizar" a las mujeres que practican la interrupción del embarazo, han exigido al Gobierno regional que cumpla con la actual legislación ofreciendo la educación afectiva y sexual a toda la población, en especial a la más joven, y desbloqueen la posibilidad de realizar interrupción voluntaria del embarazado en los hospitales públicos de la Región. A su vez, instan a López Miras a que abandone la actitud insumisa, intentando imponer sus propias creencias y deseos a los demás, y respete la autonomía de las mujeres a decidir sobre su cuerpo y su vida, o en su caso siga el mismo camino que Ruiz Gallardón.
