La viceportavoz del Grupo Parlamentario Socialista Isabel Casalduero ha manifestado que los presupuestos regionales para 2019 en materia de Turismo y Cultura "son el fiel reflejo de la decadencia de un gobierno regional falto de ideas y de recursos y carente de proyecto de futuro para la Región".

Casalduero manifestó que este presupuesto varía de forma ínfima con relación a 2018 y recordó que han sido tres los consejeros y consejeras de Turismo y de Cultura en cuatro años, "lo que da idea de la importancia que el Gobierno regional del PP confiere a esta cuestión, para la que ha llevado políticas erradas e inconexas, sin estrategia ni continuidad".

En su opinión, los distintos gobiernos del PP en la Región han desaprovechado e incluso han permitido que se pierda buena parte de nuestro patrimonio cultural y han planteado unas políticas turísticas cortoplacistas, que nos han puesto en situación de inferioridad en relación a otras provincias limítrofes "a las que nada tiene que envidiar la Región de Murcia en cuanto a su potencialidad".

Sobre la elaboración del Plan Estratégico de Patrimonio Cultural, para el que se destinan 25.000 euros, la viceportavoz señaló que llega décadas tarde y el presupuesto contemplado para este fin en 2018, dotado con 100.000 euros, no se ha ejecutado.

En cuanto a otras actuaciones, como el bono cultural, no se ha puesto en marcha. "Se repiten los mismos 500.000 euros destinados a su puesta en marcha desde hace 3 años; suponemos que este año se vuelven a incluir para contentar a Ciudadanos".

Significativo es también para Isabel Casalduero que se repitan las aportaciones para la rehabilitación del patrimonio de Lorca como consecuencia de los terremotos, más de 5,7 millones de euros presupuestados en 2018, procedentes del BEI, que tampoco se han ejecutado y van varias prórrogas.

Respecto al castillo de Mula, el presupuesto asignado para 2019 es de 200.000 euros, muy lejos del millón de euros necesario para acometer la primera fase de las obras, según el Plan director.

La Consejería de Cultura solo habrá gestionado un 20 por ciento del presupuesto del programa de protección del patrimonio histórico cuando acabe este año; mientras que reducen un 36 por ciento el presupuesto del centro de Restauración; "datos muy valiosos para concretar que solo vende humo y cuya actividad es absolutamente residual para el Gobierno regional".

Para el próximo año hay partidas que menguan significativamente o directamente desaparecen sin haber sido ejecutadas, como es el caso de la tan anunciada recuperación del espacio de La Conservera, el Plan director de los pozos de nieve o el Plan de rehabilitación de Molinos. Asimismo, desaparece la partida para la mejora de infraestructuras culturales municipales.

En materia de Turismo tampoco hay apuesta, es insuficiente y sin ambición, lo que contrasta con el compromiso del presidente en el debate del Estado de la Región, donde aseguró que el turismo iba a doblar su aportación al PIB regional en los próximos 15 años.

Isabel Casalduero señaló que los datos nos sitúan prácticamente igual que en 2017, que no fue un buen año, y a años luz de otras zonas con similitud a la Región. Hay una escasa apuesta por los destinos turísticos inteligentes, además llega tarde y precisa de ayudas; y un presupuesto irrisorio para innovación "que no es el futuro sino el presente del turismo".

La Región de Murcia también está muy lejos de conseguir el objetivo de destino sostenible, respetuoso con el medio ambiente, solo está centrado en la competitividad de precios. Más allá del esfuerzo realizado por los ayuntamientos, nada se ha hecho con los grandes proyectos anunciados como Región de Murcia Sefarad, el Plan de turismo Más Música Murcia, basado en la promoción de los festivales de la Región, o Región de Murcia Sacra.

Respecto al turismo gastronómico no hay reflejo para una de las principales medidas prometidas, la del Club de producto, y no existe apuesta decidida del Gobierno regional para consolidar los vuelos internacionales del aeropuerto con los que ya tenía enlace San Javier, "ni promoción suficiente para abrir nuevos vuelos para un aeropuerto que nos ha costado 250 millones de euros".

La viceportavoz socialista concluyó que este "es un presupuesto que sigue hipotecando uno de los sectores económicos más importantes para la Región, condenándonos a ser un turismo residual en el contexto nacional y ello a pesar de tener un gran potencial".