Desde Ecologistas en Acción de la Región Murciana consideramos que la mejor manera de participar en la Cumbre del Clima que se va a celebrar en Madrid del 2 al 11 de diciembre de 2019, y de acercar la misma a la ciudadanía de nuestra región, es asumiendo compromisos concretos desde el Gobierno Regional y los diferentes niveles de la administración.

El miedo a las consecuencias del Cambio Climático y cómo estas van a condicionar el modo de vida a nuestra generación y a las generaciones futuras crece en nuestra sociedad, al tiempo que aumenta la decepción tras las Cumbres por el Clima, ya que los acuerdos suelen ser tímidos y los compromisos no se cumplen.

Acercar la Cumbre a la ciudadanía supone asumir de verdad compromisos concretos por parte de las diferentes administraciones públicas, en el ámbito de sus competencias.

Los compromisos deben abordar tanto nuevas vías de acción, como el abandono de prácticas insostenibles.

Por eso, consideramos que el primer paso debe ser la inmediata Declaración por parte del Gobierno Regional del Estado de Emergencia Climática en la Región de Murcia, tal y como se les solicitó hace unas semanas desde un amplio número de organizaciones ambientales y sociales de diversa índole.

Además, y en coherencia con dicha declaración del Estado de Emergencia Climática, proponemos que se anuncie la puesta en marcha de medidas concretas frente al Cambio Climático.

Desde Ecologistas en Acción proponemos las siguientes, divididas en dos bloques.

El primer bloque se corresponde con medidas de mitigación y reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y el segundo bloque con medidas de adaptación frente a las consecuencias del Cambio Climático en la Región de Murcia.

Medidas de Mitigación del Cambio Climático 

1. Plan de medidas urgentes de mejora del transporte público (itinerarios, conectividad, frecuencias y precios) y de pacificación del tráfico en los cascos urbanos, incluyendo peatonalización de calles, creación de más carriles bici tanto urbanos como interurbanos y de calles-30 y recuperación de solares y espacios para ampliar la superficies de uso peatonal, como paseos, jardines y parques públicos.

2. Promoción de los circuitos de proximidad, favoreciendo puntos de distribución y venta en las ciudades de productos locales (kilómetro cero, mercados de cercanía etc), con el fin de reducir el transporte de alimentos y otras mercancías a larga distancia. Creación de un sello de calidad que permita identificar productos de proximidad.

3. Promoción de la agricultura y ganadería agroecológica y extensiva, por tener un balance neto de emisiones ambientalmente mucho más favorable que la agricultura y ganaderías intensivas.

4. Ampliación de las zonas que actúan como sumideros de carbono, a través de la recuperación de la vegetación autóctona tanto en espacios naturales como en espacios agroforestales, en áreas degradadas e incremento de los espacios verdes con vegetación en áreas urbanas. Ampliación de áreas protegidas, recuperación de caminos públicos y vías pecuarias.

5. Revisión de los criterios de subvención a empresas para medidas de mitigación de emisiones, con el fin de evitar el acceso a las mismas a las empresas que no cumplan de forma estricta con las normativas ambientales y concentrar en cambio las ayudas a las empresas que vayan más allá de lo exigido por la normativa vigente.

6. Medidas concretas para reducir las emisiones derivadas del funcionamiento de la propia administración pública en todos los ámbitos: - Todos los edificios públicos de la CARM y de los municipios (incluyendo centros educativos, residencias, centros de salud, hospitales, alumbrado público, etc) han de contratar antes de junio de 2020 la electricidad con compañías o cooperativas que sólo comercialicen energía de fuentes renovables.

- Normas de ahorro y eficiencia energética para todos los edificios públicos y alumbrado público. Con metas anuales realistas de ahorro y eficiencia energética, verificables, que vayan desde la colocación de elementos pasivos (toldos, ventanales…) a normas de uso (luces, a/a, etc).

Establecer responsables de la implementación y supervisión de las medidas e indicadores que permitan verificar el cumplimiento.

Planes de asignación de plazas de funcionarios en función de su lugar de residencia habitual, de manera que se reduzcan los desplazamientos diarios.

Fomento del teletrabajo de toda la jornada o de una parte de ella.

- Establecer criterios de compra y contratación de las administraciones públicas en los que prime la producción local, agroecológica, con menor uso de combustibles y elementos sintéticos, con formas de desplazamiento sin emisiones, con mayor porcentaje de reutilización y uso de materiales reciclados, con menos uso de materiales de un solo uso, etc.

7. Respecto a centros de enseñanza: 

- Asignación de centro educativo público en función del lugar de residencia o trabajo, para evitar los desplazamientos innecesarios.

- Fomento de itinerarios seguros a pie y en bici, para fomentar formas de transporte sostenible a centros educativos.

- Bancos de libros obligatorios en todos los centros públicos, de manera que no se genere todos los años un consumo innecesario de libros de texto que luego acaban engrosando el volumen de residuos.

- Fomentar que los comedores escolares y de cualquier centro público de enseñanza, y de hospitales, tenga un menú saludable, basado en productos locales de temporada y de proximidad, a ser posible agroecológicos.

- Establecer comisiones mixtas de docentes/alumnado que se encarguen de auditar el funcionamiento del centro educativo, e identificar acciones encaminadas a la reducción de emisiones, el ahorro energético, la reducción de envases de un solo uso, la reducción de residuos, etc.

De esta forma no sólo se contribuye a reducir las emisiones, sino que se puede aprovechar como un recurso educativo que ayude a concienciar.

Medidas de Adaptación frente al cambio climático 

8. Plan de creación de valor añadido en la agricultura de secano (productos de calidad, variedades autóctonas, transformación artesanal), por su mayor resiliencia y capacidad de adaptación frente a la reducción de recursos e incremento de las sequías derivadas del cambio climático, que serán especialmente graves en el Sureste y la Región de Murcia. Elaboración de un plan de I+D para el secano.

9. Auditoría del regadío de la Región de Murcia, con el fin de identificar y eliminar los perímetros de regadío ilegal, para reducir la demanda hídrica y por tanto la vulnerabilidad del propio sector agrario frente a unos recursos hídricos decrecientes debido al cambio climático. Valorar de forma realista cuanta superficie de regadío cabe en la Región de Murcia.

10. Protección estricta de los regadíos históricos en torno a los espacios urbanos, por su papel en la mitigación de las olas de calor que ya están empezando a aumentar su intensidad y frecuencia debido al cambio climático, incluyendo la recuperación de vegetación natural a lo largo de acequias, caminos y lindes entre parcelas, así como el descimbrado de acequias por su papel ambiental y en el mantenimiento de unas condiciones microclimáticas más favorables.

11. Adaptación urgente de los Planes Generales Municipales de Ordenación de todos los municipios de la Región de Murcia a la Cartografía Oficial de Zonas Inundables de la Demarcación del Segura, recalificando a No Urbanizable las zonas inundables e incluyendo un plan priorizado para trasladar los equipamientos más vulnerables en zonas de elevado riesgo (hospitales, guarderías, residencias sociales, centros educativos, etc), a la vista del incremento de los riesgos de inundaciones derivados del cambio climático.

12. Aplicación de Sistemas Urbanos de Drenaje Sostenible en los espacios urbanos y de Soluciones Basadas en la Naturaleza en los espacios agrarios, por ser medidas que incrementan sensiblemente la resiliencia de estos sistemas frente a las lluvias torrenciales, reduciendo notablemente los daños causados por tales lluvias torrenciales y por los riesgos de inundación asociados.

13. Fomento de sistemas productivos y sectores no dependientes de la disponibilidad de agua, como adaptación a la frecuencia y duración de las sequías, diversificando la economía regional y promoviendo sectores emergentes y no dependientes del agua como el sector de las energías renovables, los sectores relacionados con la restauración ambiental, la rehabilitación de viviendas, la conservación y reparación de bienes y equipos o los servicios relacionados con los cuidados.

Aumentar el arbolado frondoso en los entornos urbanos (calles, plazas, patios de colegios, solares municipales…) que ayude a reducir el efecto “isla térmica”, eligiendo especies autóctonas resistentes a las altas temperaturas y con menos requerimientos de agua.

Aplicar buenas prácticas de mantenimiento del arbolado que incluyan pavimentos permeables alrededor, evitar las podas agresivas, etc.