En estos instantes, está produciéndose la ciclogénesis cuasi explosiva de la borrasca Karine, cuya carta de presentación han sido las lluvias y el vendaval.
Ahora Karine está en el Golfo de León, provocando rachas de viento de componente norte y noroeste fortísimas, en muchos casos superiores a los 100 km/h.
Este mediodía, la intensidad del viento empezará a amainar, aunque las rachas moderadas continuarán pasadas las medianoche en las sierras del centro y este, así como en la desembocadura del Ebro.
En las sierras más septentrionales la cota de nieve descenderá hasta los 800 o 900 metros; en el este del Sistema Ibérico quedará por encima de los 1000 metros.