Tras una "larga e intensa" negociación los representantes del CEUM finalmente han votado a favor de esta normativa extraordinaria, aunque señalan que "no comparten el texto en su totalidad" y lo hacen "para no poner en riesgo los avances conseguidos y por responsabilidad".
Entre las cuestiones destacadas que el CEUM consiguió que se reconociese en la negociación figura:
•Si bien habrá videovigilancia, esta implica que no puede producirse un endurecimiento de las condiciones objetivas de la prueba, y, por tanto, no se pueden asumir las decisiones académicas tomadas en la elaboración de los Sistemas Alternativos de Evaluación que endurecían las pruebas como herramienta para controlar que no se usen medios fraudulentos.
•Cualquier incidencia sobrevenida en relación con la conexión o medios electrónicos permitirá al estudiante acudir a la convocatoria de incidencias, tantas veces como fuese necesario, es decir, que si en incidencias vuelve a producirse un fallo sobrevenido, se volverá a ir a incidencias. Asimismo, se incluye que cualquiera de estas incidencias durante la realización del examen no puede influir negativamente en la calificación de la misma.
•La videovigilancia será única y exclusivamente el visionado de la cara. Esto quiere decir que no se habilita normativa prácticas consistentes en enseñar el conjunto de la habitación, ni enseñar las manos, ni puede estipularse que tiene que haber dos cámaras (una enfocando el frente y otra desde la espalda del estudiante), ni se puede compartir la pantalla del ordenador, por ejemplo.
•Los estudiantes tendrán derecho a ver el examen y abandonarlo en los primeros quince minutos sin que se haya gastado convocatoria. Por ende, aquellos estudiantes que tras ver el examen así lo consideren se considerarán como no presentado.
•La videovigilancia de pruebas escritas test o de desarrollo única y exclusivamente supondrá la visualización, no la grabación como se estipulaba en un primer momento en el documento remitido. Por tanto, solo se podrán grabar las pruebas orales, tal y como ocurría presencialmente.
•Aquellos estudiantes que sufran un fallo de conexión momentáneo y puedan reconectarse deberán ser admitidos de nuevo en el examen por el profesor.
Para los estudiantes, que se habían manifestado abiertamente en contra del uso de mecanismos de videoconferencia en cualquier prueba distinta de la oral "por los problemas técnicos asociados", la decisión de apoyar este texto es "difícil". Siempre hemos defendido que tiene que garantizarse "el control y la identificación en el desarrollo de las pruebas, pero hay alternativas más razonables a la videovigilancia permanente".
Los representantes del CEUM han puesto su cargo a disposición de los estudiantes convocando una cuestión de confianza que el Pleno de este Consejo resolverá el jueves que viene. Entendemos que haya personas que no compartan nuestra decisión, "pero hemos intentado salvar el mejor texto posible, no podíamos permitirnos perderlo todo".
