La federación empresarial del metal demanda a la D. Gral de Salud Pública por escrito que los instaladores se integren dentro del subgrupo 3B del protocolo del Comité de Salud Pública.
La Federación Regional de Empresarios del Metal de Murcia, FREMM, ha solicitado a la Dirección General de Salud Pública de la Región de Murcia que se proceda a vacunar los trabajadores del metal que se ocupan del mantenimiento de las instalaciones en todo tipo de centros hospitalarios y sanitarios y en residencias de atención a personal dependientes. FREMM basa su petición por el alto riesgo de exposición de su actividad laboral.
Desde FREMM, también se ha pedido que la petición se traslade Al Ministerio de Sanidad y que se considere desde el Comité de Salud Pública al grupo de instaladores del metal integrantes del subgrupo 3B, dentro del Grupo 3, donde se incluye a otro personal sanitario y sociosanitario. Los colectivos acogidos son fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, personal de oficinas de farmacia, medicina legal, servicios de ayuda a domicilio, centros de menores y de centros de día. También están los trabajadores de Instituciones Penitenciarias.
Responsables del mantenimiento
La importancia de la labor desarrollada por el colectivo de instaladores del metal quedó demostrada en primavera pasada, cuando se construyó el "Hospital de IFEMA". Soldadores e instaladores de electricidad, fontanería y conductos de gas, entre otros oficios, acudieron como voluntarios desde todas partes de España, incluidos de la Región de Murcia.
Además de ser necesarios para construir dependencias, también son imprescindibles para velar por el buen mantenimiento y funcionamiento de los servicios. Así, cualquier avería en instalaciones gas, fontanería o conductos de aire, entre otras, en cualquier dependencia debe ser atendida por profesionales del metal, quienes deben entrar en quirófanos, UCIS, plantas o habitaciones de edificios sanitarios o de residencias, con el consiguiente riesgo que supone para su salud durante la pandemia actual.
