Ambos centros colaboran en el Proyecto 'ET1Biocook' que ha centrado su estudio en el envase de los encurtidos y en el de los alimentos listos para su consumo y almacenados en refrigeración, un sector que crece y está ganando mucha importancia entre la población

Tradicionalmente se utilizan films sintéticos con baja tasa de biodegradabilidad por lo que el Proyecto nace para satisfacer la demanda de los consumidores cada vez más exigentes con el respeto al medioambiente

El Centro Tecnológico Nacional de la Conserva y Alimentación (CTNC) ha desarrollado, junto al Centro Tecnológico del Calzado y Plástico (CETEC), un plástico biodegradable para reemplazar los films de envasado menos sostenibles.

La idea del Proyecto 'ET1BIOCOOK', acrónimo que da nombre al estudio, surge de la creciente preocupación del sector del envase y embalaje para reemplazar los films de envasados con productos petroquímicos por materiales más sostenibles; esto, unido a satisfacer la demanda por parte de los consumidores cada vez más exigentes con la sostenibilidad, ha llevado al CTNC y al CETEC a colaborar en este Proyecto, cuyo objetivo es el análisis y desarrollo de films plásticos biodegradables válidos para envasado de alimentos procesados estables a temperatura ambiente.

Estudio, que se ha centrado en los encurtidos y en el de los alimentos listos para su consumo y almacenados en refrigeración (de V Gama) por ser un sector muy importante en la Región de Murcia que está incrementando su consumo crece y ganando mucha importancia entre la población.

El material polipropileno comercial, utilizado como control en el envasado de alimentos, (de los 4 bioplásticos desarrollados por CETEC, la formulación F6, con la menor permeabilidad al O2) presenta unas buenas características de transparencia, resistencia al tratamiento térmico y estanqueidad, según se desprende de las conclusiones del estudio.

Asimismo, los investigadores han concluido, también que, dependiendo de las características del alimento y la intensidad del tratamiento térmico, el mismo tipo de plástico se comporta de forma diferente.

Ambos centros han trabajado, en paralelo, desde que se inició el proyecto en enero de 2020, con un plan dividido en 4 líneas de actuación, recabando información y datos de partida del proyecto en relación a los materiales, propiedades de los alimentos a procesar y los parámetros de proceso.

El CETEC desarrolló bioplásticos resistentes al pH y a la temperatura, para ser utilizados por el CTNC en el envasado de alimentos. A su vez, este último Centro elaboró encurtidos (pepinillos y aceitunas verdes) y alimentos de V gama (pimiento asado y menestra de verduras) en envases tradicionales de polipropileno que se pueden comparar con los bioplásticos desarrollados por CETEC. Posteriormente, se realizó un estudio comparativo de estabilidad microbiológica, físico-química, nutricional y sensorial entre ambos tipos de envases.

Cabe recordar que, en los últimos años, los alimentos precocinados y preparados para su consumo íntegro y directo, elaborados con técnicas sostenibles y métodos físicos, lavados desinfectados, mantenidos refrigerados y, generalmente, envasados en atmósfera modificada (EAM) en una película plástica, con las propiedades sensoriales y nutritivas del producto original y con calidad y seguridad garantizada han experimentado un gran desarrollo comercial para satisfacer las nuevas demandas de los consumidores.

Los alimentos precocinados o de la V Gama experimentan uno de los mayores crecimientos de la industria alimentaria mundial por atender esta demanda y los nuevos hábitos de compra a un coste razonable. Por otro lado, los alimentos tradicionales estables a temperatura ambiente o de II Gama están demandando nuevas soluciones de envasados más sostenibles con el medioambiente y que reduzcan su huella hídrica y de carbono.

Tradicionalmente, se utilizan films poliméricos (polietileno, polipropileno), tanto para los alimentos II Gama, estables a temperatura ambiente como para los alimentos V Gama, alimentos listos para su consumo que se almacenan en refrigeración, debido a su gran disponibilidad a un coste relativamente bajo con un buen rendimiento mecánico y una buena barrera al oxígeno y al dióxido de carbono. Sin embargo, el uso extensivo de films sintéticos ha dado lugar a graves problemas medioambientales debido a su baja tasa de biodegradabilidad.

Este proyecto ha sido subvencionado por el Instituto de Fomento de la Región de Murcia (INFO) y cofinanciado en un 80% con recursos del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), asignados al Instituto de Fomento de la Región de Murcia con arreglo a la Subvención Global mediante la Decisión C(2015)3408, de la Comisión, por la que se aprueba el Programa Operativo de intervención comunitaria FEDER 2014-2020 en el marco del objetivo de inversión en crecimiento y empleo, en la Comunidad Autónoma de Murcia, como Región calificada en transición.