La Guardia Civil investiga al conductor de un camión que, presuntamente, originó un accidente después de desatender la caída de 14 balas de paja a la calzada

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Ocurrido en la autovía A-30 (Albacete-Cartagena), término municipal de Lorquí

La Guardia Civil investiga al conductor de un camión que, presuntamente, originó un accidente después de desatender la caída de 14 balas de paja a la calzada

Tres de los ocupantes de la furgoneta, que colisionó contra las balas esparcidas en la calzada, resultaron con heridas graves, dos con heridas leves y un sexto resultó ileso

Al investigado se le atribuye la presunta autoría de los delitos de lesiones, por imprudencia grave, y delito de originar un grave riesgo para la circulación

El camión transportaba un cargamento de paja desde Albacete hasta Cartagena

La Guardia Civil de la Región de Murcia ha desarrollado una investigación para esclarecer las causas de un siniestro vial, ocurrido en la autovía A-30 (Albacete-Cartagena), término municipal de Lorquí, en la que los seis ocupantes de una furgoneta resultaron con heridas de diversa consideración después de impactar contra unas balas de paja que se encontraban esparcidas en la calzada.

En Albacete, la Benemérita ha localizado al conductor del camión que presuntamente originó el incidente, al que se le atribuye la presunta autoría de los delitos de lesiones, por imprudencia grave, y de originar un grave riesgo para la circulación.

La investigación se inició cuando la Guardia Civil fue alertada del siniestro vial, ocurrido en la autovía A-30 (Albacete-Cartagena), a la altura del término municipal de Lorquí, por el impacto de una furgoneta contra varias balas de paja esparcidas en la calzada.

Fruto del golpe, la furgoneta volcó y golpeó las barreras metálicas de protección de la vía, resultando tres de sus ocupantes heridos graves, otros dos de carácter leve y un sexto ileso, además de cuantiosos daños tanto en el vehículo como en la propia vía.

Después de auxiliar a los heridos y restablecer la circulación, agentes del Sector de Tráfico de la Guardia Civil instruyeron el oportuno atestado, realizaron la inspección técnico ocular, así como la recogida de vestigios, entre los que se encontraban 14 pacas de paja, con un peso aproximado de 250 kilos.

Guardias civiles de los equipos de Atestados, especialistas de Transportes, y del Grupo de Investigación y Análisis de Tráfico (GIAT) de la Guardia Civil, iniciaron una laboriosa tarea de análisis para localizar el vehículo, cuya carga, por su mal acondicionamiento, había caído en marcha, mientras su conductor, haciendo caso omiso al riesgo creado, continuó su ruta.

Los guardias civiles conocieron que el transporte de paja se dirigía a alguna localidad de la comarca del Mar Menor, por lo que después de incesantes indagaciones localizaron el punto donde se había entregado el resto de la mercancía, en la pedanía de cartagenera de La Guía.

Localizado en Chinchilla (Albacete)

En colaboración con el Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Albacete y después de veinte días de investigación, este hilo conductor y el resto de indicios obtenidos permitieron localizar un vehículo articulado, cuyas características coincidían plenamente con las del camión buscado, en un polígono industrial de Chinchilla (Albacete).

El conductor varón, de 31 años y vecino de Bonete (Albacete) ha resultado investigado como presunto autor de los delitos de lesiones, por imprudencia grave, y delito de originar un grave riesgo para la circulación.

La persona investigada ha sido puesta a disposición del juzgado de Instrucción número 3 de Molina de Segura (Murcia).

La caída en la vía de la carga de un vehículo por su mal acondicionamiento, creando un grave peligro para el resto de los usuarios de la vía, constituye una infracción calificada como muy grave al Reglamento General de Circulación, pudiendo ser constitutivo de un delito contra la seguridad vial, si se produce por negligencia grave.

El delito de lesiones por imprudencia grave con vehículo a motor está castigado con penas de prisión de 3 a 6 meses o multa de 6 a 18 meses y privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores de 3 meses a 1 año.

Por su parte, el delito de originar un grave riesgo para la circulación, al derramar parte de la carga transportada, convirtiéndose en un obstáculo imprevisible y no restableciendo la seguridad de la vía, cuando haya obligación de hacerlo, está castigado con penas que oscilan entre la prisión de 6 meses a 2 años, o a la de multa de 12 a 24 meses y trabajos en beneficio de la comunidad de 10 a 40 días, en función de las circunstancias concurrentes en cada caso concreto.

En este sentido la Guardia Civil apela a la ciudadanía para que colaboren, cuando presencien o tengan conocimiento de un incidente o accidente de circulación, tomando nota del mayor número de datos posibles, en especial tipo, características y matrícula de los vehículos implicados y lo comuniquen a las Fuerzas de Seguridad en el menor tiempo posible, para facilitar la identificación de los conductores implicados en los siniestros viales.

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