"La inversión pública, además de proteger el patrimonio, actúa como palanca de desarrollo sostenible, generando empleo, atracción turística y conciencia patrimonial, pero al PP, con su voto en contra, pone de manifiesto su nulo interés en este asunto"

La diputada regional socialista Lola Jara ha asegurado que el Partido Popular ha vuelto a demostrar su desprecio hacia el patrimonio cultural de la Región de Murcia, al oponerse a la declaración de Bien de Interés Cultural de las casas torre, en el municipio de Murcia.

Jara ha hecho estas declaraciones tras la Comisión de Cultura de la Asamblea Regional, en la que se ha debatido una moción del Grupo Parlamentario Socialista para la declaración BIC de las casas torre de la huerta de Murcia, y a la que el PP ha votado en contra.

Ha explicado que las casas torre constituyen un conjunto patrimonial de gran valor histórico, arquitectónico y social, únicas en el contexto del sureste peninsular. "La ubicación de estas casas torre, siempre respondía a criterios estratégicos, por lo que eran levantadas en lugares con buena visibilidad del territorio, cercanas a fuentes de agua y tierras fértiles, y próximas a caminos rurales o acequias. Llegaron a dominar la huerta de Murcia, combinando la arquitectura defensiva con elementos propios del sistema hidráulico tradicional, como norias o acueductos menores".

La diputada socialista ha indicado que su restauración y rehabilitación no solo implica conservar elementos arquitectónicos únicos, sino también recuperar la memoria de la huerta murciana, reforzar la identidad local y promover el turismo cultural y rural, en un momento en el que la arquitectura vernácula están en serio peligro de desaparecer.

En este sentido, ha destacado que la mayoría de estas casas torre se encuentran en estado de abandono o ruina y amenazadas por el crecimiento urbano descontrolado, por lo que han sido incluidas por la Asociación Hispania Nostra en la lista roja del patrimonio.

"Algunas fueron derribadas, como ocurrió con las torres de la Marquesa, la del Huerto de las Bombas, o la de Torre de Romo. Otras corrieron mejor suerte, como la torre Junterón, que tras ser reformada alberga el Museo de la Ciudad de Murcia; la torre de los Ayllón, actual Museo del Belén en Puente Tocinos; la torre de los Marqueses en Espinardo, ocupada por el Colegio de la Consolación, o la torre Aledo de Churra, rehabilitada como residencia de mayores".

Jara ha defendido la coordinación entre las administraciones regional, local y otros agentes como universidades, asociaciones vecinales, colegios profesionales y los propietarios, para establecer planes integrales de conservación y divulgación, así como su declaración como Bien de Interés Cultural, "algo fundamental para otorgarle un marco legal para su conservación".

"Esta declaración facilitaría, además, el acceso a fondos para su restauración, mantenimiento y uso público o cultural.Y tampoco debemos olvidar que la inversión pública, además de proteger el patrimonio, actúa como palanca de desarrollo sostenible, generando empleo, atracción turística y conciencia patrimonial", ha concluido.