"Dicen muchas mujeres que el cáncer no es rosa, sino marrón, y tienen un buen marrón en Andalucía con el cribado de las mamografías". Así arrancaba esta mañana la diputada regional de Podemos en Murcia, María Marín, la alocución en la que relataba cómo el escándalo del cribado de las mamografías en Andalucía le ha hecho "revivir" estos días "la pesadilla" que sufrió con el diagnóstico de su propio cáncer de mama. "En mi caso explicaba-, pasé cuatro meses sin noticias después de que me hicieran una biopsia porque no se me quitaba el dolor". "Me dijeron que me avisarían si algo estaba mal, pero nunca me avisaron continuaba-. Tuve que ser yo la que insistiera en tener los resultados y entonces descubrí que tenía un cáncer de mama infiltrativo que ya se había extendido a una axila".
La portavoz morada se mostraba "segura" de que el suyo no fue un caso aislado, porque "los ataques que sufre la sanidad pública acaban afectando a lo más básico". "Por eso he decidido hacer pública mi experiencia declaraba Marín-, ya que son varias las mujeres que me han contactado y les pido que denuncien su situación y que reclamen justicia". "La lucha contra el cáncer de mama es dura, muy dura y necesitamos estar juntas para afrontarla y que no le suceda a ninguna otra mujer", concluía.
